Esta increíble alternativa para el azúcar de origen orientar ha ganado mucha popularidad. Es un fruto que se produce en el sudeste de Asia, posee unas propiedades endulzantes maravillosas que no tienen comparación alguna. A continuación, te contaremos más acerca de este espléndido endulzante y las razones por las que podría considerarse un remplazo válido a la azúcar tradicional.
Conozcamos más sobre la fruta del monje.
Si lo que quieres es un edulcorante que se aleje de lo tradicional, esta fruta es una gran elección. Además, este endulzante no posee ningún tipo de calorías y necesitas muy poca cantidad para endulzar.
La fruta del monje es muy famosa por sus propiedades endulzantes. Se descubrió en Asia, por lo que se le atribuye su origen a ese lugar. Se dice que hace mucho tiempo atrás, sus ancestros la usaban como un remedio para combatir enfermedades como la diabetes y la obesidad. Es un alimento sin caloría alguna y con un color verde. Se desconoce el origen de su nombre, pero lo más probable es que lo hayan puesto de esa forma por el hecho de que, en el pasado, los que cultivaban dicha fruta eran los monjes.
La forma de esta fruta es parecida a la de un coco pequeño. Su pulpa se puede comer como cualquier otra fruta, mientras que el zumo o extracto deshidratado y procesado que convierten en polvo es un poderoso endulzante, sin calorías y mil veces mejor que el azúcar tradicional. Además, esta fruta tiene grandes beneficios para nuestra salud, ya que contiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y puede neutralizar los radicales libres protegiendo a las células gracias al actuar de los mogrósidos.
Los países asiáticos han visto el gran potencial que tiene esta fruta, es por ello que han comenzado a cultivarla en masa, ya que la fruta del monje se puede convertir en una alternativa a la azúcar tradicional, siendo más saludable por su 0% de calorías.
Otras propiedades de la fruta del monje.
La fruta del monje no solo tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, sino que también cuenta con la capacidad de inhibir el crecimiento de las células cancerosas. Además de que, a pesar de sus propiedades endulzantes, esta fruta no permite que el nivel de azúcar en la sangre se altere y, con esto, no ocasiona que una persona sufra de diabetes. De hecho, hasta el día de hoy no se ha encontrado contraindicaciones en el consumo de esta fruta, y tampoco se exige moderación en su uso.
