¿Con qué frecuencia se deben cambiar las sábanas de la cama?
Lavar las sábanas de la cama y cambiarlas con frecuencia es esencial. Averigüemos las reglas principales juntos.
Las bacterias pueden vivir en nuestros hogares durante días, semanas o incluso meses. De ahí la importancia de cambiar periódicamente las sábanas y, por supuesto, desinfectarlas con productos de limpieza.
¿Con qué frecuencia debes cambiar las sábanas?
La mayoría de las personas siguen medidas de higiene y limpieza. Sin embargo, aunque a menudo parece que no hay suciedad, no significa que no haya una gran cantidad de bacterias. Estos no solo se encuentran en las sábanas, sino también en los colchones, en el dormitorio y en innumerables objetos circundantes.
Como regla general, las sábanas de la cama deben cambiarse al menos una vez a la semana. La razón más importante es que las sábanas de la cama se vuelven todo menos higiénicas. El sudor se asienta en ellas, pero también la suciedad del exterior y los fluidos corporales.
Cuando se habla de la suciedad de las sábanas, también hay que mencionar la posible presencia de hongos. Además, noche tras noche, las células muertas de nuestra epidermis se depositan en el tejido. Su presencia atrae a los ácaros del polvo, lo que es todo menos saludable, especialmente para la respiración.
Cómo lavar las sábanas de la cama
Cuando se trata de lavar las sábanas de la cama, vale la pena detenerse no sólo en la periodicidad, sino también en cómo lavarlas. Lo primero que hay que destacar en este sentido es evitar mezclar las sábanas con la ropa. De esta manera, puedes limpiarlas a fondo.
Si realmente quieres destruir las bacterias, debes prestar atención a los siguientes puntos:
No exageres con la carga: es muy fácil tomar toda la ropa y hacer una carga. Sin embargo, si realmente quieres que la lavadora los limpie, sólo tienes que poner un juego de sábanas.
Configuración del programa: Si las sábanas están muy sucias, recomendamos elegir el ciclo más fuerte. En cualquier otro caso, un ciclo regular es suficiente.
Si dejas las sábanas en la lavadora demasiado tiempo, se pueden encoger, así que se recomienda lavarlas con más frecuencia. Si por razones de economía, se hace objetivamente difícil dedicar una sola lavada a la ropa de cama, es mejor poner las sábanas con telas ligeras de algodón, pero nunca con toallas.
Déjelas secar: las sábanas suelen tardar un poco más en secarse que el resto de la ropa.
Temperatura: aunque las sábanas no tengan manchas difíciles, lo mejor es lavarlas con agua tibia o templada, es decir, entre 40 y 60 °C. Es la única manera de evitar que los ácaros sobrevivan.