La celulitis es uno de los mayores enemigos de las mujeres y suelen aparecer en varias partes del cuerpo: los muslos, las nalgas, la zona abdominal, las piernas y los brazos.
Utilizando palabras técnicas, la celulitis recibe el nombre de panículo adiposo, la cual está vinculada al metabolismo de cada individuo. Si el metabolismo se reduce, la reserva adiposa disminuye, este hecho se denomina lipólisis; en cambio, cuando ocurre lo contrario, se genera un aumento en el depósito de grasas, a lo que se le llama lipogénesis.
Lo que ocasiona principalmente la aparición de la llamada piel de naranja es la acción directa del estrógeno. ¿Sabes qué son los estrógenos? Nada más y nada menos que las hormonas femeninas, por esta razón es que afecta especialmente a las mujeres. Estas hormonas contribuyen en la retención de líquidos, ayudando al proceso de aumento de volumen y ruptura de las células, provocando consecutivamente disfunciones en la microcirculación e inflamaciones en el propio tejido adiposo.
En realidad, se genera en 2 fases:
Fase joven: Es la primera aparición y se cataloga como una fase madura que se forma en zonas específicas del cuerpo, quedándose en varias áreas del organismo.
Fase antigua: Se refiere a la aparición en una parte del organismo de manera permanente.
En todas las fases es posible llevar a cabo algunos sencillos consejos para tratar de deshacerse de la celulitis en tan solo 30 días. Una de las mejores recomendaciones para reducir la parte de los muslos y mejorar la salud es caminar a un ritmo regular.
Masajes deportivos y anticelulíticos.
Salir a caminar a un ritmo medio puede ayudarte a quemar hasta 300 calorías por hora, mejorando el tono de los músculos del muslo en poco tiempo, pero también la salud de todos los órganos internos de nuestro cuerpo. Asimismo, es importante tomarse un día de descanso a la semana, para dejar que el cuerpo descanse luego de los entrenamientos.
Los masajes anticelulíticos son realmente muy efectivos para combatir la celulitis. Para realizar esta acción, se recomienda utilizar una buena crema, aceite de almendras o un simple aceite drenante. Pon un poco de aceite en tus manos, frótalas y espárcelo en la zona a afectada. Después, con las yemas de los dedos toma una parte de la zona y haz pequeños pellizcos, recuerda realizar esta acción de abajo hacia arriba.
Nutrición anticelulítica.
Este es un aspecto fundamental a la hora de combatir este fenómeno. Debes dejar de lado los alimentos que tengan altos contenidos en grasas y sal, principalmente los alimentos procesados.
Para llevar a cabo una dieta que pueda prevenir la aparición de la celulitis se debe tener en cuenta que la comida sea saludable y equilibrada, optando por las proteínas que contribuyen al desarrollo muscular, los alimentos ricos en vitamina C y hierro. Asimismo, para obtener carbohidratos escoge los alimentos integrales, ricos en fibra, y también alimentos ricos en potasio, que contribuyen en el proceso de drenaje de los líquidos.
Otro factor que no podemos dejar de lado es el agua, se recomienda tomar al menos entre un litro y medio y dos litros diarios, y tal vez por la tarde preferir infusiones drenantes, útiles para el exceso de líquidos en el organismo.
Hay tratamientos profesionales para contrarrestar la celulitis de forma intensa con 4 tipos de técnicas:
El láser: Contribuye en el drenaje de líquidos gracias al calor que se genera.
La liposucción: Ayuda a deshacerse del exceso de grasa del organismo.
La presoterapia: Es una técnica en la que se oprimen los lugares afectados con un equipo en particular para ayudar en el drenaje.
La mesoterapia: Se usan pequeñas agujas que inyectan fármacos bajo la piel para eliminar el exceso de líquido.
También existen métodos tradicionales, los cuales son los más usados, son tratamientos que emplean el uso de cremas específicas, como por ejemplo REVITOL.
REVITOL.
Los beneficios con los que cuenta esta crema son que se deshace de las toxinas almacenadas en las células grasas, incrementa el metabolismo local para eliminar la mayor cantidad de grasa posible, reduce el tamaño de las células grasas del organismo y aumenta la elasticidad y la fuerza del tejido conectivo.
