¿Sufres de hinchazón y dolores de barriga? ¿Sabías que la hinchazón intestinal está estrechamente relacionada con la alimentación? Entonces, ¿Qué puedes hacer para mejorar estas molestias digestivas? ¡Te lo explicamos!
Gases: la causa de la hinchazón
El término «aerocolia» se refiere a una acumulación de gas en el colon. ¿Por qué producimos gas? Simplemente porque tenemos bacterias, un pequeño organismo microscópico, en nuestro intestino grueso -o colon- sin coste alguno. Estas bacterias son esenciales para nuestra supervivencia, ya que sin ellas no podríamos realizar la digestión o protegernos contra otras bacterias patógenas, por ejemplo. Y estas bacterias no sólo están ahí de forma gratuita, sino también con pensión completa, ya que se alimentan de lo que absorbemos. Convierten los residuos digestivos en otros sustratos, incluidos los gases. Esto se llama fermentación. Dependiendo de lo que comamos, habrá diferentes fermentaciones, con más o menos producción de gas.
Los gases también pueden ser causados por la ingesta de demasiado aire al comer. Aunque la aerocolia no es peligrosa, es desagradable. Los principales síntomas de la aerocolia son la hinchazón, el dolor abdominal, los gases e incluso los eructos (¡o simplemente los eructos de los bebés!).
Síntomas de una sobreproducción de gases
¿Quizá ya ha experimentado un exceso de producción de gases? Los principales síntomas son:
- Abdomen distendido o hinchado,
- Dolor durante la digestión,
- Dolor de estómago,
- Flatulencia.
Por lo tanto, ¡la hinchazón y los gases están estrechamente relacionados! ¿Sabe que emitimos una media de 15 a 20 pedos al día, es decir, de 50 a 150 centilitros de gas al día? ¡Y tengan cuidado, señoras! Porque todas las princesas que somos, somos buenas productoras de gas, con más de un 30% de gas en comparación con los hombres (así que claramente: ¡nos tiramos más pedos!).
10 consejos para limitar los gases y la hinchazón
1 – Coma despacio.
2- ¡Evita el agua con gas, por supuesto! Y todos los refrescos también.
3 – Olvídate de los chicles u otras gomas de mascar: generalmente contienen azúcares no fermentables que tienden a aumentar el proceso de fermentación. Del mismo modo, absorbemos demasiado aire al masticarlas.
4 – Limitar una dieta demasiado rica en fibra: desgraciadamente, aunque la fibra tiene efectos interesantes para la salud, sólo se digiere ligeramente en el intestino y, por tanto, ¡es un auténtico festín para nuestras bacterias! Pero cuidado: no los elimines de tu dieta porque, a pesar de todo, tienen muchas ventajas. Evitar las frutas y verduras crudas, por ejemplo
5 – Limitar los alimentos pesados y grasos: dificultan aún más la digestión.
6 – Para las personas con colopatía funcional, una dieta baja en FODMAPs limitará sin duda la producción de gases.
7 – Evite comer demasiada carne roja.
8 – Cuidado con la leche: la lactosa puede causar problemas intestinales. Sin embargo, el yogur, el requesón y el queso se toleran mejor.
9 – Evitar ciertos alimentos como la col, el brócoli (conocidos como la familia de las crucíferas): tienden a aumentar la producción de gases.
10 – ¡Y limitar el estrés y la ansiedad! La hinchazón está muy relacionada con nuestro estado de ánimo.
¿Qué remedios existen para los gases y la hinchazón?
Además de los alimentos que debes evitar, ten en cuenta algunos alimentos que pueden aliviar la hinchazón:
- Diente de León
- Bálsamo de limón
- Sage
- Té de hierbas
- Tomillo
- Romero
- Acuérdate también de tomar agua.
¿Por qué tanto olor?
¿Y sí? ¿Por qué no producimos gases que huelan a rosas o a vainilla? Eso sería más apropiado. También en este caso, las bacterias producen sustratos de fermentación olorosos. A veces son los compuestos de azufre los que dan un olor desagradable, que se acerca al del «huevo podrido».
La composición de un pedo es en promedio:
- 59% de nitrógeno
- 21% de hidrógeno
- 9% de dióxido de carbono
- 3% de oxígeno
- 1% de sulfuro de hidrógeno (la cosa que apesta).
Pero esto es una media, y dependiendo del tipo de gas que se produzca en los intestinos, el olor del pedo será más o menos fuerte.
¿Y por qué el ruido?
El ruido del gas que sale del ano depende de la presión del gas. Cuanto menor sea la presión, más silencioso será el pedo, y viceversa: si la presión del gas es mayor, la piel que rodea el ano vibrará bajo el efecto de esta presión, de ahí el sonido musical, tan reconocible que será imposible decir «¡no, no soy yo!». Pero cuidado, hay musicalidad en el sonido emitido: cuanto más se tensan los músculos del ano, más rápido vibra el ano y más alto es el sonido producido.
Patologías asociadas a la hinchazón y los gases
La hinchazón y los gases pueden ser aislados, es decir, puntuales y directamente relacionados con nuestros estados de estrés o con lo que acabamos de comer (comida demasiado rica, demasiado grasa, etc.). Los medicamentos pueden aliviar estas dolencias bajo consejo médico.
Cuidado, si los síntomas persisten, será necesario consultar a un médico, porque las patologías están asociadas a estos síntomas. Entre ellas se encuentran la colopatía funcional o síndrome del intestino irritable, la intolerancia a la lactosa, la enfermedad por reflujo gastroesofágico, etc.
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