4 maneras de mantenerse físicamente saludable a partir de los 60 años

A medida que pasan los años, cuidar del cuerpo no solo mejora la calidad de vida, sino que también reduce el riesgo de enfermedades crónicas. Pero ¿cómo podemos lograrlo a partir de los 60? Aquí te presentamos algunas estrategias prácticas y efectivas para mantenerte en forma y lleno de energía.
Mantente activo con ejercicio regular
Incorporar actividad física regular puede marcar una gran diferencia en cómo te sientes día a día. Recuerda que no necesitas ser un atleta; optar por caminatas diarias, clases de yoga o tai chi, o incluso practicar natación son actividades accesibles y efectivas. Estas opciones no solo fortalecen los músculos y las articulaciones, también ayudan a mejorar el equilibrio, reduciendo el riesgo de caídas.
Además, usar bandas de resistencia o realizar movimientos con pesas ligeras puede prevenir la pérdida de masa muscular, algo común con el paso de los años. Si estás comenzando desde cero, lo ideal es ir despacio. Escucha a tu cuerpo, establece metas alcanzables y, si es posible, consulta con tu médico antes de embarcarte en una rutina nueva.
Adopta una alimentación saludable y balanceada
Seguir un plan alimenticio balanceado, como la dieta mediterránea, es una excelente idea. Este enfoque privilegia alimentos como frutas, verduras, granos integrales, pescados y legumbres, limitando el consumo de carnes rojas, lácteos altos en grasa y azúcares añadidos.
La fibra también desempeña un papel importante. Por esa razón, consumir cereales integrales, frijoles y frutas no solo mejora la digestión, sino que también ayuda a mantener un corazón sano. Para hombres mayores de 60 años, se recomienda consumir al menos 30 gramos de fibra al día, mientras que las mujeres deben apuntar a undefined gramos.
Por último, mantenerse hidratado es esencial, ya que con el envejecimiento es más fácil sentirse menos sediento, pero el cuerpo aún necesita suficiente agua para funcionar correctamente. Intenta tomar agua durante el día y limita bebidas azucaradas o con cafeína en exceso.

Cuida la calidad del sueño
Dormir bien no es solo un lujo; es una necesidad. Por ese motivo, muchas personas mayores enfrentan problemas de sueño, pero un buen descanso es crucial para renovar el cuerpo y la mente. Establecer una rutina de sueño regular, como acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, puede ayudar a mejorar la calidad de tu descanso.
Evita la cafeína y el alcohol en las horas previas a dormir, y crea un ambiente relajante en tu habitación. Un espacio oscuro, tranquilo y fresco es perfecto para descansar. Si además incorporas ejercicios suaves durante el día, notarás cómo mejora tu capacidad de relajarte por la noche.
Busca apoyo y conexiones significativas
Rodearte de personas que te apoyen puede ser tan importante como cualquier otra práctica. Unirte a grupos de caminatas, clases de ejercicio comunitarias o actividades recreativas no solo fomenta tu bienestar emocional, también puede generar nuevas amistades y mantener tu motivación para ser activo.
Además, contar con un compañero de ejercicios podría ayudarte a mantener el hábito. Si alguna vez te falta motivación, la compañía puede ser el empujón extra que necesitas. Nunca subestimes el poder de la conexión humana en tu camino hacia un estilo de vida saludable.
Dar pequeños pasos hacia un estilo de vida más saludable a partir de los 60 no solo mejora tu físico, también impacta positivamente tu energía, humor y capacidad para disfrutar de las cosas que amas. No importa si empiezas a un ritmo lento; lo importante es mantenerte constante y comprometido contigo mismo.
Con estas acciones estás protegiendo tu cuerpo y mente para mantenerte fuerte y activo por muchos años más. ¡Ahora es momento de dar el primer paso!