Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es fundamental mantener una correcta hidratación para combatir el calor. Además de beber los 2 litros de agua recomendados diariamente, una buena alimentación puede ayudarnos a sentirnos frescos e hidratados. Existen alimentos que actúan como aliados para hacer frente al calor del verano.
Una dieta refrescante para combatir el calor
Una dieta abundante en ensaladas, frutas y verduras nos ayudará a mantenernos hidratados y frescos durante los meses de calor. Los alimentos mencionados anteriormente son ideales para combatir el calor del verano, ya que tienen propiedades hidratantes, refrescantes y nutritivas. Incorporar estos alimentos a nuestra alimentación diaria nos permitirá disfrutar de los meses de calor mientras cuidamos nuestra salud. Entre estos, podemos destacar los siguientes:
Especias y pimientos picantes
Aunque pueda parecer contradictorio, las especias y los pimientos picantes pueden ayudarnos a combatir las altas temperaturas. Estos ingredientes estimulan la circulación sanguínea y provocan la sudoración, lo que nos ayuda a reducir el calor corporal. En países como méxico, india o etiopía, donde las temperaturas son muy elevadas, es común encontrar el uso de condimentos picantes en sus recetas.
Bebidas calientes
Aunque pueda resultar sorprendente, las bebidas calientes también pueden ayudarnos a combatir el calor. Al consumir bebidas calientes, nuestro cuerpo entra en un proceso de sudoración que contrarresta los efectos del calor. Por otro lado, el consumo de bebidas heladas puede hacer que la temperatura corporal descienda rápidamente, pero el organismo compensa este descenso aumentando nuevamente la temperatura, lo que hace que la sensación de frescor sea efímera.
Menta
La menta, gracias al mentol contenido en sus hojas, proporciona una sensación refrescante a nuestras mucosas. Esta hierba estimula los receptores del frío y nos ayuda a sentirnos más frescos durante los días calurosos.
Frutos rojos
Los frutos rojos, como las moras, frambuesas y cerezas, son ricos en antocianinas, compuestos que tienen un efecto antiinflamatorio y ayudan a disminuir la presión arterial. Estas propiedades facilitan la vasodilatación y contribuyen a regular la temperatura corporal, manteniéndonos frescos.
Sandía y melón
La sandía y el melón son frutas que contienen una gran cantidad de agua, lo que las convierte en excelentes aliados para combatir el calor. La sandía tiene un 93% de contenido de agua, mientras que el melón tiene un 92%. Además, ambas frutas son bajas en calorías, lo que las hace ideales para mantenernos hidratados sin aumentar la ingesta calórica.
Tomate
El tomate es rico en licopeno, vitamina A y vitamina C. Estos nutrientes estimulan la producción de sudor y ayudan a mitigar la sed, lo que lo convierte en un alimento muy eficaz para disipar el calor del verano. Una forma deliciosa de disfrutar del tomate durante esta temporada es a través del gazpacho, una opción refrescante y nutritiva.
Zanahorias
Además de ser una hortaliza con alto contenido de agua, las zanahorias contienen betacarotenos, los cuales ayudan a proteger la piel de los radicales libres y reducen el riesgo de quemaduras solares. Consumir zanahorias de forma regular puede contribuir a mantener una piel saludable y bronceada durante el verano.
Melocotones y albaricoques
El melocotón y el albaricoque son frutas de temporada que contienen un alto porcentaje de agua, alrededor del 87%. Además, son una excelente fuente de potasio, hierro y vitamina C, lo que las convierte en alimentos con un alto contenido nutricional. Estas frutas son perfectas para disfrutar solas o como parte de ensaladas y postres frescos.
Espinacas
Las espinacas son una excelente opción para mantenernos hidratados durante el verano, ya que contienen un 92% de agua. Además, son bajas en calorías, con tan solo 23 kcal por cada 100 gramos. Incorporar espinacas a nuestras comidas puede ayudarnos a mantenernos frescos e hidratados sin preocuparnos por un exceso de calorías.
Pepino
El pepino es conocido por su sabor refrescante y su naturaleza fresca, lo que lo convierte en un ingrediente muy utilizado en ensaladas, gazpachos y cremas de verano. El pepino contiene aminoácidos, vitamina C, agua, calcio, fósforo, hierro y fibra, lo que lo convierte en uno de los mejores alimentos para combatir el calor. Además, el pepino ayuda a mejorar el tránsito intestinal y la eliminación de toxinas.
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