Gel de reconstrucción de uñas para las manos: porqué te arriesgas a tener cáncer de piel
El cuidado de las uñas se ha convertido en una necesidad para todas las mujeres. Cortas, largas, brillantes, coloridas o dibujadas, sin renunciar a su estilo para embellecer sus manos y marcar su personalidad. Muy popular últimamente es la reconstrucción artificial de las uñas con gel, una técnica practicada en los centros de belleza que permite tener unas uñas perfectas durante mucho tiempo. La Escuela de Medicina de Nueva York, sin embargo, advierte: los hornos utilizados para secar el gel podrían causar cáncer de piel.
El cuidado de las uñas tiene orígenes antiguos, se dice que se remontan al Renacimiento. Hasta 1920, se utilizaron productos naturales de origen animal, luego se empezaron a utilizar productos específicos, es decir, esmaltes de uñas similares a los que conocemos hoy en día. Las técnicas de belleza para las uñas se han multiplicado a lo largo de los años -las uñas postizas también se inventaron- hasta que se convirtieron en una verdadera tendencia.
Cómo funciona la reconstrucción
La reconstrucción de la uña con gel se hace limando y puliendo la uña, luego se raspa y se cubre con una primera capa de gel. Después se aplica el esmalte de uñas y finalmente el fijador. Para permitir que las diversas capas se sequen y cristalicen, las manos se colocan en un horno de rayos Uva.
Según el estudio de la Escuela de Medicina de Nueva York, el riesgo es la aparición de cáncer de piel, causado por la radiación ultravioleta. Una precaución podría ser aplicar una crema protectora, pero según Chris Adigun, autor de la investigación, ni siquiera esto sería suficiente.
Aplicar productos químicos no identificados a la uña no es en sí mismo un buen hábito: la uña se daña y se debilita. Cubrir la uña con estos tipos de esmaltes de uñas semipermanentes también evita el control de infecciones o manchas sospechosas. Sin mencionar que las infecciones causadas por la mala higiene durante el proceso de reconstrucción de las uñas no son inusuales. El consejo de Adigun, que consideramos que debemos compartir, es no abusar de estas técnicas estéticas. Mejor redescubrir el placer de tener uñas más naturales, ¡quizás vuelvan a estar de moda!
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