¿Cuál es la diferencia entre un aceite de oliva virgen y un virgen extra?
No hay duda de que uno de los mejores productos gastronómicos que tiene España es el aceite de oliva, un producto que ya no solo es un alimento conocido por sus numerosas propiedades nutricionales, sino que también es un auténtico manjar en las cocinas españolas.
Aceite de oliva extra virgen.
El aceite de oliva extra virgen es un fluido que se oxida y pierde calidad con mucha facilidad. Requiere que sea almacenado un máximo de 20 meses después del prensado con el fin de garantizar la prevalencia de todas sus sustancias antioxidantes y anticancerígenas. Desde el punto de vista normativo y legal, para ser considerado aceite extra virgen, este debe ser producido bajo las normas de calidad presentes en el reglamento europeo numero 2568/91.
Principales características del aceite de oliva extra virgen.
Comencemos por la definición estándar para la categoría de aceite extra virgen: Es un tipo de aceite que es extraído mediante el uso exclusivo de métodos mecánicos, por lo que no se permiten aditivos ni tratamientos adicionales. También pasa por un proceso en temperaturas que no superan los 28 °C y su nivel de acidez no debe ser superior al 0,8%.
Para dar más claridad sobre el cuidado y la calidad necesaria para obtener un aceite de oliva extra virgen, también se controla con mucho cuidado todas sus etapas de producción con tal de garantizar la conservación de todas las propiedades organolépticas.
Aceite de oliva.
El aceite de oliva o aceite virgen es sometido a otros pasos durante su producción, pasos que afectan su calidad y al índice de acidez del producto final, el cual en este tipo de casos llega a alcanzar el 2%. Este porcentaje tan elevado está relacionado con una menor digestibilidad, además de que su proceso de refinación es hecho mediante el uso de compuestos químicos como el benceno, los cual marca una diferencia nutricional entre el aceite de oliva y el aceite de oliva extra virgen.
Clasificación de los aceites de oliva.
Después de conocer todos los detalles y diferencias entre estos dos tipos de aceites, veamos una pequeña clasificación de los tipos de aceites de oliva.
Aceite de oliva extra virgen: Es el aceite con las características organolépticas más valiosas y con la presencia de ácido oleico. Es necesario que su nivel de acidez se mantenga por debajo de los 0,8 gramos por cada 100 gramos.
Aceite de oliva virgen: Su nivel de pureza es menor que el anterior, pero su índice de acidez no debe superar los 2 gramos por cada 100 gramos.
Aceite de oliva: Está compuesto por una mezcla de aceites refinados y aceites de oliva vírgenes con un nivel de acidez inferior al 1%.
Aceite de orujo de oliva: Es un producto que no es comestible, está decolorado, desodorizado, falto de acidez y extremadamente refinado. Solo puede llegar a ser comestible si se le añade aceite virgen.