¿Qué le ocurre al cuerpo cuando pasa por una deficiencia nutricional?
Muchas veces nos preguntamos de dónde vienen los dolores que sentimos en el cuerpo y cómo podemos remediarlos. La forma como nos alimentamos y especialmente las deficiencias nutricionales tienen mucho que ver. Desde los detalles más pequeños, hasta los problemas de salud más importantes, hoy veremos cuáles son las causas de las dolencias físicas y qué soluciones existen para remediar estos problemas.
Así puedes evitar la aparición de granos rojos y blancos.
Los bajos niveles de ácidos grasos y vitamina A y D puede potenciar la aparición de esos molestos y dolorosos granos antiestéticos. Te recomendamos aumentar tu consumo de grasas buenas, las cuales están presentes en el salmón y los frutos secos. Además, para aumentar los niveles de vitamina A, las zanahorias o los boniatos son súper efectivos.
¿A qué se deben las erupciones en la piel?
Las deficiencias nutricionales suelen afectar al estado de la piel y provocar estas erupciones. Unos niveles demasiado bajos de zinc pueden provocar estas erupciones cutáneas. Para solucionar este problema y recuperar la piel lisa, puedes consumir más levadura de cerveza, frutos secos, semillas de calabaza o productos lácteos.
Ansiedad.
Si recientemente te sientes muy estresado, te recomendamos aumentar tu consumo de vitamina B. De nuevo, esta se encuentra disponible en las espinacas, los espárragos, las judías y los huevos. Si eres amante de los mariscos, las ostras, los mejillones, el pulpo y las almejas, estas también pueden ser tus aliados para eliminar la ansiedad.
Aparición de comisuras agrietadas en la boca.
Cuando las comisuras de la boca se encuentran agrietadas, esto suele ser causado por una deficiencia de vitamina B, hierro o zinc. Si quieres solucionarlo con rapidez, puedes encontrar altas dosis de esta vitamina en alimentos como el salmón, los huevos, el atún o los mariscos.
Este es uno de los motivos de la pérdida de cabello.
Cuando estamos consumiendo poco zinc, las consecuencias son numerosas y pueden provocar la caída del cabello. En este tipo de casos, alimentos como el salmón, el aguacate y la coliflor son los mejores aliados posibles. En cuanto al consumo de frutas, las frambuesas y los plátanos también pueden solucionar el problema rápidamente.
Calambres y dolores en las piernas.
Los calambres y el dolor frecuente en las piernas suelen estar causados por una alimentación baja en potasio, calcio y/o magnesio. Afortunadamente, e nuestra dieta hay muchos alimentos cotidianos que los contienen, entre ellos los plátanos, las manzanas, las cerezas y los frutos secos como avellanas y almendras.
Hormigueo y anquilosis en las manos y pies.
En algunas ocasiones el entumecimiento y rigidez en las manos y pies son causados por una falta en los niveles de vitamina B. Esta vitamina se encuentra presente en grandes cantidades en las espinacas, los espárragos, las judías, los huevos y muchos tipos de mariscos.
Fatiga excesiva.
Si no estás teniendo problema para conciliar el sueño y dormir al menos 7 horas cada noche, pero en la mañana sigues manteniéndote muy agotado, la causa puede ser una deficiencia de vitamina D. La exposición al sol es una solución más efectiva, pero también puedes consumir aceite de hígado de bacalao o bebidas de soja.
Depresión.
Más allá de la fatiga extrema, la carencia de vitamina D puede ser responsable de causar un aumento de los episodios depresivos. Para evitar esto, aumenta tu consumo de aceite de hígado de bacalao, bebidas de soja, trucha, hígado de ternera y salmón.
Sensación de ardor.
Además de producir ansiedad, la falta de vitamina B también puede generar una sensación de ardor. Para evitar este síntoma, aumenta tu consumo de verduras verdes como espárragos, espinacas y legumbres como judías.