Muchos no lo saben, pero preparar una buena pizza tiene algunos trucos que son importantes y que muchas veces no consiguen ser aplicados correctamente. Por esa razón, hoy te hablaremos de uno de los efectos secundarios más frecuentes del consumo de pizza: la sed.
A todos nos gusta la pizza, es uno de los platillos más consumidos en el mundo, sobre todo en Italia. Se trata de un alimento hecho con una base de masa de pan, generalmente delgada y redonda, a la que se le agrega salsa de tomate, queso mozzarella o cualquier otro alimento y se cocina al horno. Pero, ¿Quién de ustedes nunca ha tenido sed después de comerla? El motivo es muy curioso y te sorprenderá.
A continuación, te contamos algunas razones por las que esto sucede, y estamos seguros de que te sorprenderán.
La pizza es muy salada: Aunque hay poco dentro de la masa, se lidia con el condimento que puede ser tomate, mozzarella, chorizo y mucho más. Además, una mala levadura también podría provocarte ganas de beber agua y esto último conduce a una mala digestión. Toda la noche la masa sin levadura seguirá subiendo en el estómago provocando aún más sed.
El proceso de maduración: Una masa que se fermenta muy rápido necesita más levadura, lo cual indigesta y da sed. Es importante mantener la humedad de la masa, ya que cuando se seca pierde elasticidad. Si se respetan los tiempos de maduración, la pizza será más digerible y buena. Allí es donde los tiempos de maduración son importantes, puesto que esta es la fase en donde las enzimas hidrolíticas (amilasa y proteasa) que se encuentran en la harina y, activado por el agua añadida en la masa, descomponen los almidones y el gluten. En este proceso influyen varios factores: las características de la harina, la temperatura del ambiente y el tiempo de la levadura. Lo ideal es un proceso que dure de 1 a 2 días a una temperatura entre 4 y 25/26 ° C. si se cumplen con estas condiciones, la maduración de la masa será perfecta.
Entonces, ¿Cómo se puede evitar tener mucha sed después de comer pizza?
Existe una manera de evitar esta molesta situación y es comer pizzas que contengan poca sal como las de verduras, o también acompañar la comida con agua mineral natural en vez de bebidas azucaradas, gaseosas o con alcohol. Si te gusta preparar pizza, opta por ingredientes frescos y de buena calidad, pero ten cuidado con la sal.
