Consejos para mantener una excelente salud intestinal
La microbiota intestinal tiene una gran influencia en nuestra salud física y mental. Imaginemos una vía llena de alimentos fermentados que, si son observadas con un microscopio, están llenos de bacterias. Estas bacterias descomponen los alimentos en vitaminas, aminoácidos y otros nutrientes esenciales, colonizando el sistema digestivo desde el nacimiento. A esto le sumamos la leche materna, los lugares en los que vivimos, el entorno, las personas que conocemos, los alimentos e incluso los animales que conviven con nosotros. A los tres años, nuestra microbiota intestinal ha alcanzado casi por completo su composición final.
Desequilibrio intestinal y sus efectos sobre la depresión
Generalmente, solemos pensar que los trastornos del estado de ánimo se originan únicamente en el cerebro, pero el intestino también juega un papel importante en el correcto funcionamiento de nuestra mente. De hecho, un estudio de 2019 descubrió que los pacientes depresivos llevaban menos coprococi y Dialister que la mayoría de las personas, y otro estudio llegó a la conclusión de que los ratones que recibieron un trasplante fecal de humanos deprimidos también empezaron a sufrir afectaciones en el estado de ánimo.
¿Se pueden prevenir las enfermedades de la salud mental cambiando la microbiota?
Un experimento de 2017 ha terminado presentando resultados prometedores. En las pruebas participaron personas diagnosticadas con depresión severa y bajo medicación o terapia. La mitad de ellos continuaron el tratamiento mientras seguían una dieta mediterránea especial, rica en cereales integrales, proteínas magras, verduras y frutas, mientras que la otra mitad seguía su dieta frecuente sin ningún tipo de cambio. Los resultados mostraron una mejora de los síntomas depresivos mayor en el grupo con una dieta especial que estimulaba el funcionamiento intestinal.
Desequilibrio intestinal y los problemas de peso
Hace mucho tiempo se creía que la obesidad y los trastornos metabólicos solo eran causados por el consumo excesivo de alimentos, pero hoy sabemos que la microbiota tiene influencia directa sobre el sobrepeso y la diabetes. En Bélgica, el profesor Patrice Cani y su colega, el profesor Claude Knauf han demostrado cómo el intestino y el cerebro interactúan para mantener a raya los niveles de azúcar en sangre, demostrando que las bacterias intestinales desempeñan un papel importante. Por ejemplo, la bacteria Dysosmobacter welbionis está presente en el 70% de los individuos y su cantidad está relacionada con la prevención de la aparición de la diabetes y el sobrepeso. Por lo tanto, cuantas más tengamos en nuestro intestino, mejor será la quema de azúcar y grasa.
Los investigadores belgas administraron esta bacteria a pacientes con sobrepeso u obesidad resistentes a la insulina y los resultados demostraron que esta resistencia disminuyó y perdieron más peso y grasa que aquellos voluntarios que solo recibieron un placebo.
Desequilibrio intestinal y el funcionamiento de los medicamentos
Las recetas médicas no siempre ofrecen los efectos deseados, y esto tiene que ver con la microbiota intestinal. Al igual que los microbios descomponen la fibra y el almidón de los alimentos, en ocasiones atacan a los productos farmacéuticos, lo que dificulta que cumplan con su objetivo.
En 2019, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale descubrieron que al menos 271 medicamentos orales se veían afectados por el estado de la microbiota intestinal, la cual destruía en promedio un 20% de sus principios activos. Por ejemplo, si se tiene un exceso de Eggerthella lenta (una bacteria presente en uno de cada tres seres humanos) la digoxina, un medicamento para el corazón, puede no ser efectivo. Recientemente, varios estudios médicos han revelado que la microbiota si tiene un papel en la respuesta a las inmunoterapias contra el cáncer.
A partir de estos trabajos se ha hablado de una ciencia que estudie el impacto de la microbiota intestinal en el funcionamiento de los fármacos, llamada “farmacomicrobiómica”. Se espera que dentro de 10 o 15 años, un médico pueda analizar sin problema la microbiota de sus pacientes a partir de una muestra fecal y ajustar su prescripción para mejorar la acción de un medicamento.
Desequilibrio intestinal y la aparición de alergias
Una microbiota diversa puede tener un serio efecto regulador sobre el funcionamiento del sistema inmunitario. Si tu microbiota es hipersensible debido a las particularidades de la flora intestinal, es más probable que aparezcan alergias, asma y eczemas.
Justamente es por eso que se habla de la importancia de la exposición a una amplia gama de bacterias en los primeros años de vida. De hecho, se ha demostrado que los niños nacidos por parto natural tienen una menor probabilidad de sufrir alergias que aquellos nacidos por cesárea o que se han criado en una granja, con mascotas y hermanos mayores.
Los antibióticos también pueden desencadenar efectos graves, porque al matar a los microbios que nos hacen enfermar, destruyen la flora diversa que mantiene al intestino sano. Por último, los pacientes que son recetados con antibióticos antes de cumplir un año tienen el doble de probabilidades de padecer asma a los cinco años, riesgo que aumenta con cada tratamiento.
Mejora tu flora intestinal diversificando tu dieta
Nuestro objetivo final debe ser mantener una microbiota intestinal diversa, pero no se trata solo de consumir grandes cantidades de fibra, ya que existen alimentos que contribuyen a ello. Una dieta variada, con frutas y verduras es una garantía de buena salud intestinal. Por el contrario, el consumo de alimentos procesados afectan las cepas bacterianas útiles y reducen la diversidad de la microbiota.
¿Cómo mejorar la flora intestinal usando probióticos?
Los probióticos pueden salvarnos de la diarrea severa en lugares donde recibimos bacterias nuevas. Cuando nos vamos de viaje a otro estado, cuidad o país, las bacterias se ven seriamente afectadas. De hecho, los probióticos proporcionan alivio a las víctimas del síndrome del intestino irritable, pero te recomendamos consultar a un profesional de la salud para saber bien cuál debes consumir.
Actualmente, los científicos trabajan para comprender mejor el funcionamiento de los probióticos y se estima que en un periodo de 5 a 10 años habrá probióticos de calidad médica para todos en el mercado.
Mejora tu flora intestinal estando en constante movimiento
Se ha demostrado que el ejercicio frecuente es favorable para la microbiota. Un estudio de 2016 de la Universidad de la Columbia Británica demostró que los atletas con la mejor aptitud cardiorrespiratoria tenían una flora intestinal más variada. Otro estudio, realizado en España, llegó a la conclusión de que las mujeres que hacían ejercicio durante tres horas a la semana mejoraban ampliamente la composición de su microbiota intestinal.