¿Realmente funcionan los masajes anticelulíticos?
La celulitis es uno de los problemas estéticos más comunes a nivel mundial, especialmente en el caso de las mujeres. Sin embargo, tener celulitis no quiere decir que se esté pasando por sobrepeso, que estemos enfermas o que sea imposible tratarlas con paciencia y disciplina.
Ya que es un problema que acompleja a muchas personas, es posible encontrar varias alternativas que dicen reducir la celulitis, tratándose de opciones más o menos eficaces. Una de las más popularizadas en los últimos años son los masajes, los cuales aseguran que pueden ayudar a drenar el exceso de líquido corporal, redistribuir las células grasas y mejorar el funcionamiento de la circulación general en el organismo, lo que a su vez alivia el aspecto de esas zonas que puedan estar siendo afectadas por las grietas de este problema estético.
Sin embargo, debemos recordar que, por más intenso y recurrente que sea, un masaje no tiene el poder de curar y eliminar por completo la celulitis. Si bien es cierto que pueden mejorar poco a poco el aspecto de nuestra piel, los resultados no suelen durar mucho y es común ver que sea necesario repetir los tratamientos con frecuencia para poder hablar de resultados realmente notorios.
Por otra parte, los estudios más recientes han demostrado que algunas técnicas de masaje si pueden tener un efecto positivo en la notoriedad de la celulitis, pero estos mismos estudios también advierten que los resultados solo han podido ser temporales. Por lo tanto, si estás pensando en someterte a sesiones de masajes, sé consciente de las limitaciones con las que cuenta e infórmate bien antes de iniciar cualquier tratamiento.
Igualmente, la mayoría de los tratamientos no solo consisten en aplicar masajes en zonas específicas, son sesiones que necesariamente deben ir acompañadas de cambios en la alimentación, requiriendo renunciar al consumo de azúcares refinados casi por completo y optar por preparaciones que sean bajas en sal. También es necesario comenzar una rutina de ejercicio moderado y focalizado en las zonas a tratar, como pequeñas sesiones de sentadillas para piernas y glúteos, o abdominales hipopresivos para tratar la celulitis ubicada en el vientre. Así que, si bien el masaje tiene su importancia, se debe cambiar nuestro día a día para que puedan ser resultados verdaderamente notables.
Por último, no está de más mencionar que este tipo de masajes cuenta con muchos otros beneficios para la salud. Investigaciones y expertos han demostrado que estos pueden ayudar al organismo a sentirse más relajado, reducir la tensión y el dolor en músculos y articulaciones, además de reducir la sensación de dolor. Por lo tanto, si tienes celulitis o no, someterse a sesiones de masajes es una alternativa que ofrecerá muchos beneficios a nuestro cuerpo.