Un turista rompe dos reliquias antiguas en el Vaticano por no poder reunirse con el papa
El hombre oriundo de los Estados Unidos azotó contra el suelo dos esculturas
Un hombre proveniente de los Estados Unidos llegó al Vaticano y destrozó dos reliquias antiguas. El hecho ocurrió en el Museo Chiaramonti, donde el sujeto de aproximadamente 50 años de edad, pidió ver al pontífice y se enfureció al recibir una respuesta negativa.
Los detalles de este impactante suceso dan cuenta de que mientras el señor llevaba a cabo un paseo a la hora de la comida por el pasillo de la ‘Galleria Chiaramonte’, él expresó su sentimiento de querer conocer en persona a la mayor autoridad de la región católica.
Al recibir la mala noticia (que a fin de cuentas era lógica porque el papa no se reúne con cada persona que llega al Vaticano), el turista enfureció y no hubo quien lo detuviese: arrojó un busto al suelo y, al intentar salir huyendo del lugar, derribó otro. Dichas esculturas tendrían una antigüedad de más de 2.000 años.
¿Hubo castigo por los hecho en el Vaticano?
De acuerdo con las primeras averiguaciones, el hombre parece estar recibiendo su castigo y también tratando su problema por «trastornos psicológicos». Los bustos que se dañaron fueron transportados al taller de mármol de los Museos Vaticanos, en donde los especialistas comenzaron a trabajar para repararlos. De esta forma se informó que el daño a las esculturas no era tan grande: las caras no sufrieron grandes daños, tal vez a una de las dos piezas se le desprendió un trozo de la nariz.
Muchos esperan que, a raíz de este nuevo suceso, el Vaticano decida por fin reforzar la seguridad en los museos, como lo hizo después de la vandalización de la ‘Pietá’, de Michelangelo, en la Basílica de San Pedro, en 1972. En aquel año, un geólogo de Hungría atacó con un martillo a la famosa estatua de mármol, la cual más tarde fue reparada y desde entonces se exhibe detrás de un vidrio a prueba de balas.
Por esta razón, cuando el turista tomó cierta actitud agresiva, fue rápidamente interceptado por varios guardias del museo y entregado a la gendarmería vaticana y luego a las autoridades. De acuerdo con el periódico Il Messaggero, el hombre había exigido ver al papa Francisco con la excusa de que necesitaba dar un mensaje importante.
¿Qué sucedió con las obras ligeramente dañadas?
Fueron dos obras de arte las que salieron en peor estado: el retrato de un anciano con velo y el busto de un joven. Según Il Messaggero: «Ambas fueron trasladadas a un laboratorio especial para la restauración de material pétreo de los Museos Vaticanos. Aunque, se dice que, a pesar de ser de unos dos milenios de antigüedad, son obras de arte secundarias y no famosas».
Matteo Alessandrini, director de la oficina de prensa de los Museos Vaticanos, a la CNN, afirma: «Los bustos estaban fijados a las estanterías con un clavo, sin embargo, si se halan con fuerza, se desprenden. Desprendió a uno, luego al otro, y los guardias acudieron inmediatamente a arrestarlo. A pesar de que ambos bustos estaban dañados, la gravedad del asunto no es fatal, ya que uno de ellos perdió parte de la nariz y una oreja, en cambio, el otro se le salió la cabeza del pedestal».
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