La mujer, de 23 años, padece tricotilomanía, una patología que se caracteriza por la compulsión de comer y arrancarse el pelo. Tras un breve periodo de la enfermedad, cuando era tan solo una niña, Sophie pensó que la había superado definitivamente, hasta que hace seis años se dio cuenta de que tenía calvas en la cabeza y de que se tiraba y mordía los mechones mientras estaba dormida. Y hace poco, los médicos descubrieron que la ingestión de tantas hebras había dejado a Sophie, madre de Alice, una pequeña de tan solo 20 meses, una bola de pelo gigante en el estómago que la estaba matando poco a poco.
Aunque pueda parecer imposible para muchos, lo que le ocurrió a esta joven es real y sucede en muchas personas a lo largo de todo el mundo. En este caso particular, dentro de su estómago se encontraron casi 7 kilos de pelo. El diagnóstico de la joven dice que llevaba varios años sufriendo tricofagia y tricotilomanía. En el primer caso la compulsión forzada e inconsciente de comerse su propio pelo, y en el segundo arrancándoselo sin querer. Pues bien, durante los dos últimos años, Sophie Cox había estado sufriendo terriblemente de dolores abdominales cada vez que comía, dolores que con el paso de los meses habían reducido su piel y sus huesos. En el proceso se realizaron una gran cantidad de exámenes, ya que, al principio, se pensó que era una forma particular y rara de cáncer, pero más tarde se atribuyó el fenómeno a un caso de anorexia, lo cual fue un diagnóstico erróneo. Esto continuó hasta que un día la joven no pudo soportar el dolor y se desmayó. Al ser trasladada al hospital, los médicos decidieron que lo mejor era realizar una operación lo antes posible. Una vez fue cortada la pared del estómago, la sorpresa se apoderó de los rostros de todos los presentes: en su interior se había formado una masa anormal de pelo, de unos 7 kilogramos, la cual se identificó como el de la propia joven.
¿Qué es la tricofagia?
La tricofagia es el deseo involuntario de comerse el propio pelo, especialmente si es largo. En estos casos se come cuando aún está pegado a la cabeza y luego se traga. Es posible que, sobre todo si se comen de forma continuada, se acumulen en el tracto gastrointestinal provocando efectos secundarios como indigestión y dolor gástrico, o incluso llegando a acumularse dentro del organismo hasta formar bolas de pelo llamadas tricobezoar. En estos casos, puede ser necesaria una operación para eliminar la masa o las masas. De hecho, en el año 2007 se documentó la extracción de un tricobezoar de unos 4,5 kg del estómago de una joven de 18 años en Chicago, y en 1999, una niña británica murió por una hemorragia interna tras una operación para extirpar un tricobezoar.
Según cuenta la joven: «Últimamente cada vez que ingería algo vomitaba y por eso, después de que una endoscopia rutinaria lo revelara, los médicos no tuvieron más opción que operarme para extraerlo de mi estómago».
Algunas investigaciones señalan que estos casos están muy relacionados con los altos niveles de estrés
Según la historia clínica de la mujer, el malestar comenzó como consecuencia del estrés debido a su embarazo, gracias al cual los médicos pudieron «afortunadamente» entender la causa del problema. Sin embargo, las molestias de Sophie continuaron durante varios meses. Cuando al fin se descubrió el problema, no fue operada de inmediato, sino que tuvo que esperar otros cinco meses, tiempo en el que tampoco pudo tomar medicamentos para controlar las molestias. Hoy, la joven madre está bien, fue operada con éxito, se le quitó la enorme masa de pelo y ha empezado un tratamiento para combatir la tricofagia.
