¿Por qué el tiempo pasa rápido cuando estamos ocupados? Esto dicen los expertos
Muchas personas aseguran que cuando están activos las horas se le van mucho más rápido
Seguramente se te habrá ocurrido al menos una vez en tu vida: sentirse como si estuvieras fuera de los momentos cotidianos, como la espera en la parada del autobús, donde se tiene la sensación de que el paso del tiempo es extremadamente lento y agotador.
Al mismo tiempo, también se te habrá ocurrido que, cuando estás pasando algún momento agradable con amigos y familiares, o quizás mientras estás en un concierto o mientras te relajas en vacaciones, el tiempo parece que pasa demasiado rápido. ¿Por qué sucede esto? Veamos algunos detalles interesantes.
¿Por qué el tiempo pasa rápidamente cuando se está ocupado?
Detrás de estas situaciones no hay tan solo un factor de aburrimiento, sino también otras razones bastante simples. De hecho, diversas pruebas han demostrado que cuando nos encontramos viviendo un acontecimiento emocionante y no somos conscientes de lo que ocurre y de las causas que lo provocan, o encontramos una situación en la que podemos ser nosotros mismos, el tiempo parecen transcurrir mucho más rápido que cuando nos encontramos viviendo situaciones y momentos de la vida que parecen rutinarios y aburridos.
La denominada «vinculación temporal»
En el University College de Londres, el fenómeno han también fue estudiado por el investigador Patrick Haggard y su equipo, además de la colaboración de varios neuropsicólogos que se encuentran en la misma universidad. Estos pusieron en marcha un experimento y pidieron a un grupo de voluntarios que pulsaran un botón el cual generaría un sonido tan solo unos segundos después de presionarlo.
Las pruebas permitieron llegar a la conclusión de que, cuando eran las propias personas las que pulsaban el botón, el sonido parecía llegar, en términos de tiempo, un poco antes que cuando el engranaje del sistema era activado por otros. Las pruebas determinaron que el mismo efecto sonoro y la misma sincronización no se producían si el botón se activaba, por ejemplo, debido a la acción de impulsos involuntarios.
Los científicos llamaron al fenómeno que acaban de descubrir «atadura intencional», porque hasta ahora, al menos aparentemente, este estaba estrechamente vinculado a la voluntad del sujeto, como si este pudiera depender de algún modo de la persona y no de fuerzas «mayores» o ajenas.
Básicamente, este fenómeno del que poco se habla hace que, cuando tenemos el control de nuestras propias acciones, estemos conscientes de lo que sucede con el paso del tiempo, lo que tiene como consecuencia que tengamos una perspectiva lenta o más angustiante de lo que estamos viviendo, y al mismo, el abandono de la conciencia parece alejarnos de la forma en la que generalmente interpretamos de manera inconsciente el paso de los minutos. De este modo, se tiene la sensación de una disminución o el aumento del tiempo entre las dos fases.
De hecho, a día de hoy la vinculación temporal también está siendo utilizada para estudiar ciertas condiciones psico-médicas especiales. De hecho, los pacientes que padecen problemas y complicaciones relacionadas con la esquizofrenia suelen experimentar el fenómeno de forma más aguda y crónica, como si de alguna manera tuvieran la sensación de que pueden controlar todas las situaciones y acontecimientos de la vida por sí mismos, incluido el paso del tiempo.
Por último, también ha habido estudios en los últimos años que han asociado el fenómeno de que el tiempo fluya más lento o rápido con el concepto de causa y efecto, más que con el del control del tiempo en sí. Según lo último que se ha dicho, la vinculación temporal también podría estar más asociada a la forma en que nos acercamos y aprendemos de las experiencias que nos ofrece el mundo.
