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Salud

¿Es cierto que la miel es un remedio eficaz para tratar la tos?

La miel es un endulzante natural que es muy utilizado en la preparación tanto de platillos como de remedios caseros

Muchas personas suelen tomar un vaso de leche tibia y disolver un poco de miel en ella, lo que genera múltiples beneficios en el organismo, entre ellos tratar la tos, ya que ayuda a reducir la irritación faríngea (una de sus principales causas), o lo que se deriva de ella gracias a su acción emoliente y antiinflamatoria.

Pero ¿Qué es la tos? La tos es una de las dolencias más molestas que pueden afectar tanto a adultos como a niños y suele empeorar por la noche, impidiendo que la persona pueda tener un sueño de calidad. Uno de sus principales remedios caseros es la miel, que cuenta con propiedades antibacterianas y emolientes, la cual en varias ocasiones, se disuelve en infusiones o leche caliente para poder aprovechar sus beneficios y así contrarrestar los efectos de la tos. Aunque, ¿De verdad es esto cierto? ¿Cuenta la miel con la capacidad de «curar» la tos? El Dr. Federico Leone, otorgante de Humanitas San Pío X, habla de ello en un artículo de Humanitas Salute: «Aunque muchos no lo crean, la miel es un gran remedio para lidiar con la tos».

Por muy increíble y contradictorio que suene, la tos desempeña un papel muy importante en la salvaguarda de la salud de adultos y niños, ya que sirve para despejar las vías respiratorias de material en ellas, como el exceso de mucosidad o la posible presencia de algún cuerpo extraño, como el polvo o el polen. Sin embargo, también es uno de los principales medios de transmisión de enfermedades infecciosas.

¿Cuáles son las causas?

La tos tiene múltiples causas y es especialmente frecuente en los niños, esto se debe a que es en los primeros 6 años cuando el niño tiende a contraer infecciones víricas recurrentes. Las causas más comunes de la tos son:

  1. Una gripe leve.
  2. Un resfriado común.
  3. Sinusitis con goteo retronasal.
  4. Enfermedad por reflujo gastroesofágico.
  5. Alergias que involucran la nariz y los senos paranasales.
  6. Infecciones pulmonares como neumonía o bronquitis aguda.
  7. Enfermedades como el asma, el enfisema o la bronquitis crónica.

Por lo general, la miel se suele tomar disuelta en leche caliente para aliviar la tos. Sin embargo, por sí sola también puede ser un remedio eficaz. De hecho, muchos estudios han demostrado que este ingrediente, cuando se toma durante menos de tres días, tiene un efecto positivo sobre la tos y el sueño del niño.

A pesar de esto, hay que tener mucho cuidado porque, aunque ayude a combatir la tos, no significa que solamente con tomar un poco de miel se conseguirá una rápida recuperación. En caso de que el niño persista con la tos, primero debes asegurarte de que no haya inhalado un cuerpo extraño, quizás algún pequeño componente de un juguete. Luego, hay que tener muy en cuenta la hidratación del menor, la temperatura y la humedad del entorno doméstico. Los lavados nasales y los aerosoles con una solución fisiológica pueden ayudar a eliminar la mucosidad y, de esta forma, aliviar la violencia de la tos.

Si la tos es muy persistente y no ha logrado controlarla, lo mejor que se puede hacer es acudir con un especialista de confianza. Recuerda no medicar al menor sin una fórmula médica previa, ya que solo se correría el riesgo de retrasar el diagnóstico o empeorar los efectos de los síntomas.

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Dany Levito

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