Tanatofobia: ¿Qué es y cómo tratarla?
Millones de personas la padecen en el mundo y suelen quedar desconcertados por no saber de dónde proviene este tipo de fobia
La tanatofobia es un miedo persistente y exagerado a fallecer, el cual puede incluir aspectos que tengan relación con la muerte, por ejemplo, los cementerios, los ataúdes, los hospitales, las iglesias, entre otros. Se trata de una ansiedad muy extendida que, dependiendo de la gravedad con que se manifieste, puede tener un impacto considerable en la vida de quien la padece. En casos extremos, estos sentimientos pueden influir en una persona, impidiendo que realice actividades que comúnmente hace en un día o incluso que abandone su propio hogar.
El trastorno se manifiesta de muchas formas y puede ir acompañado de ataques de ansiedad y pánico. Los principales síntomas y señales que caracterizan a la tanatofobia son:
- Mareos.
- Náuseas.
- Temblores.
- Hormigueo.
- Taquicardia.
- Nerviosismo,
- Dolor torácico.
- Angustia de vivir.
- Ataques de pánico.
- Sudoración excesiva.
- Pensamientos obsesivos sobre la muerte propia.
- Sentirse enfermo al pensar en la muerte o en morir.
- Incapacidad de sentir alegría debido al estado de terror continuo.
Cuando una persona sufre de este trastorno, por lo general evita situaciones que lo expongan a este tipo de pensamientos, como ir a funerales o ir al doctor para no ser hospitalizado. De hecho, cuando llegan estos malos estímulos mentales suelen manifestarse físicamente a través del autoaislamiento, la ansiedad, el insomnio, la incapacidad para llevar una vida normal, la ira, la tristeza, la culpa, la preocupación excesiva por la propia salud, la depresión o imaginar obsesivamente cómo podría ocurrir su propia muerte
¿Por qué las personas sienten ese miedo irracional al deceso?
En muchas ocasiones, la tanatofobia puede estar relacionada con algunas experiencias traumáticas por las que el individuo ha pasado, aunque también puede deberse a haber vivido en un entorno familiar o social disfuncional, estado en contacto con un ser querido que está a punto de morir, o porque esté gravemente enfermo. De hecho, esta fobia se manifiesta con frecuencia en los adolescentes, debido a la atracción y al temor que les genera la muerte. Aunque, según algunas estadísticas, el sexo femenino es más propenso a manifestar ansiedad y miedo a la muerte en comparación con el masculino. Si este miedo obsesivo se manifiesta durante un periodo de tiempo limitado y en ocasiones en alguna situación concreta, entonces es posible intentar resolver el problema uno mismo. En cambio, si continúa y, según la gravedad con que se manifieste, requiere la intervención de un terapeuta para ser superado.
Consecuencias
Esta terrible fobia puede ser una limitante muy grande para aquellos que están sufriendo con esta obsesión. Los sentimientos y pensamientos negativos influyen en el diario vivir, imposibilitando la interacción social con la excusa de no tener que enfrentarse a la posibilidad de morir.
¿Cómo se puede superar el miedo a fallecer?
Cuando el miedo a morir se convierte en una obsesión que impide el transcurso normal de nuestro día a día, es importante acudir con un profesional. Sin embargo, existen trucos para poder superar el miedo a la muerte:
- Céntrate en el presente.
- Habla con naturalidad sobre la muerte.
- Realiza actividades que te hagan sentir bien.
- Acepta quién eres, incluyendo tu propia debilidad.
- Trata de controlar los sentimientos de ansiedad, depresión y tristeza que surgen en el transcurso del día
- Ten claro que no todo lo puedes controlar, mucho menos la aparición de una enfermedad o el momento en que morirás.
