11 trucos efectivos para no llorar cortando cebollas
Para evitar que tus lágrimas corran al cortar una cebolla, hoy veremos varias opciones funcionales que pueden servir para decir adiós a este pequeño pero incómodo momento
Cuando vamos a cortar una cebolla, es muy común encontrarnos llorando mientras sostenemos el cuchillo frente a la tabla de cortar. Esta reacción se produce porque el ojo intenta protegerse de las partículas volátiles reconocidas que funcionan como irritantes que vienen contenidas en el tejido de la cebolla. Para evitar el famoso llanto del soffritto cuando se preparan los alimentos, algunas personas han adoptado diversos tipos de estrategias para conseguir librarse de este problema. Pues bien, el día de hoy veremos 12 opciones funcionales para no llorar al picar cebollas. Comencemos:
1. Coloca la cebolla bajo el agua
Cortar cebollas bajo el agua es un poco delicado porque su superficie se hace muy resbaladiza y difícil de manejar. En este caso, hay dos opciones: cortar la verdura en rodajas bajo el grifo o cortarla sumergida.
2. Enfría tu cebolla
Este es un remedio útil para antes de cortarla. Evidentemente, los tiempos son diferentes, ya que se requiere mínimo una hora en el frigorífico para que no nos haga llorar.
3. Afila bien tu cuchillo
Cuando se cortan las células de la cebolla, esta libera la enzima que hace que nuestros ojos lagrimeen. Cuanto más se aplasta la cebolla al cortarla, más nos enfrentamos a esta liberación. Por lo tanto, lo mejor es utilizar un cuchillo afilado para evitar romper excesivamente el tejido vegetal bulboso.
4. Moja la hoja de tu cuchillo
Humedecer la hoja de nuestro cuchillo con agua fría reduce el riesgo de que sus enzimas lleguen a nuestros ojos. Esto puede hacerse varias veces y no necesariamente antes de empezar a cortar.
5. Usa vapor
Se puede utilizar vapor para disolver los gases de la cebolla. Solo tienes que acercar una jarra de agua caliente a la tabla de cortar para que este remedio funcione.
6. Pela la cebolla con tus manos
Si usamos un cuchillo, el riesgo de liberar sustancias irritantes es mucho mayor y ocurre antes de lo debido, motivo por el que nos encontramos sollozando sin encontrar una salida. Quitar la piel que recubre la cebolla con las manos es, por tanto, un remedio útil y verdaderamente efectivo.
7. Come un trozo de pan
Muchas abuelas aseguran que masticar lentamente un trozo de pan mientras se corta la cebolla es útil, ya que la boca se llena de saliva y esto evita que los ojos ardan.
8. Usa vinagre
Es algo que muchos no saben, pero las enzimas que vienen dentro de la cebolla pueden ser vencidas por soluciones ácidas comunes como el vinagre. Así que, sumergir la cebolla, justo después de pelarla, en agua y un poco de vinagre durante 5 minutos reduce el riesgo de que se rompa con facilidad y la presencia de sustancias que nos hagan llorar.
9. Emplea accesorios varios
Los accesorios que generalmente se utilizan para proteger los ojos mientras se corta una cebolla van desde las clásicas gafas protectoras hasta las más extravagantes e intrusivas pero funcionales máscaras de buceo. En caso de que no quieras acudir a este tipo de herramientas voluminosas, siempre puedes optar por un look más desenfadado llevando gafas de natación.
10. Lentes de contacto
Así como lo ves, el dúo de lentes de contacto tiene la capacidad de evitar que los ojos entren en contacto con los gases y ofrecen una especie de barrera protectora, impidiendo su lagrimeo.
11. No te toques los ojos
Esto es muy importante, si has conseguido evitar llorar siguiendo nuestros consejos, debes evitar no cometer errores en el final. Una vez cortada la cebolla, es importante no tocarse los ojos antes de lavarse bien las manos.
