Científicos han descubierto un truco para mejorar el sueño nocturno
Permite despertarse con más energía y con actitud positiva. Vayamos a conocer más sobre este hallazgo
Reconocer a una persona que ha tenido una buena noche de sueño es fácil, principalmente en la mañana, ya que estará alerta y con mucha energía. Aunque, no siempre sucede esto, ya que hay factores que pueden impedirnos tener un sueño reparador, por ejemplo, el estrés, el envejecimiento y ciertas afecciones. Sin embargo, gracias a un grupo de investigadores han descubierto que existe una forma fácil de mejorar la calidad del sueño.
De acuerdo con lo relatado en la revista científica Sleep, obstruir todas las fuentes de luz ambiental cuando dormimos puede mejorar el estado de alerta y la memoria al día siguiente. Y para ello basta con llevar un antifaz para dormir.
«La luz ambiental puede influir en el sueño. Observamos cómo llevar un antifaz sobre los ojos para bloquear la luz durante el descanso nocturno afecta positivamente la memoria y el estado de alerta, lo que podría beneficiar ciertas actividades diarias, por ejemplo, estudiar o conducir», explican los investigadores.
¿En qué consistió el estudio?
Los científicos llevaron a cabo la investigación con dos experimentos en donde participaron 122 personas. En el primero, se indicó a 89 adultos de 18 y 35 años que llevaran un antifaz mientras dormían durante una semana, y luego un antifaz con agujeros durante la semana siguiente. Las pruebas que fueron realizadas los dos últimos días de cada semana mostraron que los participantes obtenían mejores resultados en la prueba de asociación de pares de palabras, que evalúa la capacidad de recordar acontecimientos y experiencias, después de taparse completamente los ojos mientras dormían. También se observó una mejora similar en las pruebas que miden los tiempos de reacción.
En el segundo estudio, se colocaron dispositivos para detectar la intensidad de la luz al despertar y una banda portátil para monitorizar la actividad cerebral durante el sueño a 33 voluntarios adultos con las mismas características del primer experimento. Las personas que hicieron parte en esta segunda etapa, estuvieron durmiendo tanto con un antifaz normal como con uno perforado y luego se sometieron a pruebas. Y, corroborando los resultados del primer estudio, se demostró que aquellos que llevaban un antifaz normal sin perforaciones aprendían información nueva más y recordaban mejor que los demás. Además, la información obtenida del tronco encefálico indicó una asociación entre el uso del antifaz para dormir y un aumento del sueño de ondas lentas, que es crucial para mejorar la memoria.
Los investigadores explican: «El beneficio para la memoria se predijo por el tiempo pasado en sueño de ondas lentas mientras se llevaba el antifaz. Esto sugiere que usar un antifaz para los ojos al dormir es una conducta efectiva, económica y no invasiva que podría beneficiar la función cognitiva y tener un impacto medible en la vida cotidiana».
Por último, los científicos establecieron un vínculo entre el sueño y el bienestar. Tener un descanso de calidad nos permite mantener una buena salud, afecta al procesamiento de las emociones en el cerebro y también a la forma en que socializamos con los demás. El estudio publicado en Sleep demuestra que utilizar un antifaz para dormir podría contribuir y aportar varios beneficios a nuestro descanso. Los investigadores concluyen: «Dada la gran atención que se presta al life hacking, la monitorización del sueño y las formas de mejorar las capacidades cognitivas, nuestros resultados sugieren que, en concreto, un antifaz es una forma sencilla, accesible y que no genera riesgos, que podemos aprovechar para una noche de sueño».