Alopecia en la barba: causas y posibles tratamientos
Es un tipo de alopecia areata, una condición en la que hay una pérdida repentina de cabello y vello en diferentes partes del cuerpo sin una causa especifica. En este sentido, es importante conocer cómo se manifiesta y si existe alguna opción de tratamiento para abordarla. A continuación, te contaremos más sobre el tema.
La alopecia de la barba es una condición que forma parte de la alopecia areata, una enfermedad que puede provocar una pérdida repentina del cabello y vello en diferentes áreas del cuerpo. Esta se caracteriza por la aparición de parches circulares sin la presencia de cabello en el cuero cabelludo, la barba, las cejas y otras partes del cuerpo. Estos parches pueden ser de diferentes tamaños y afectar a una o varias áreas del cuerpo al mismo tiempo.
Aunque la causa exacta de la alopecia areata sigue siendo desconocida, se cree que se trata de una afección autoinmune en donde nuestro organismo ataca por error los folículos pilosos (pequeños sacos del interior de la piel que contienen el bulbo piloso, la estructura que produce el cabello y el vello). Cuando el sistema inmunológico lo ataca, se produce una inflamación que interfiere con el crecimiento normal del cabello, provocando la carencia de cabello en algunos lugares del cuerpo.
En el caso específico de la alopecia de la barba, se manifiesta como una pérdida de vello en pequeños parches en la zona de la barbilla. Aunque este tipo de alopecia no representa una amenaza para la salud, puede tener un impacto significativo en la autoestima y la calidad de vida de las personas afectadas.
¿Cuáles son las causas?
Como ya se ha mencionado, la alopecia de la barba es una afección autoinmune, por lo tanto, no está causada por enfermedades subyacentes. Hay varios factores que podrían desencadenar la respuesta autoinmune del organismo, entre ellas destacan:
- El estrés.
- Enfermedades tiroideas.
- Algunos factores genéticos.
- Infecciones causadas por virus u hongos.
- El consumo de determinadas sustancias o fármacos.
- Otras afecciones y enfermedades autoinmunes, por ejemplo, la diabetes de tipo 1, el lupus y la psoriasis.
¿Qué síntomas se debe tener en cuenta?
Obviamente, el principal síntoma de la alopecia de la barba es la pérdida irregular de vello. Sin embargo, el desarrollo de la alopecia puede producirse repentinamente, en pocas semanas o incluso en pocos días y abarca otros síntomas muy característicos como:
- Enrojecimiento e irritación de las zonas expuestas.
- La piel expuesta que permanece sin cabello parece lisa.
- Picor o dolor en la parte donde se produce la caída del cabello.
- Aparición de vellos cortos y rotos en los bordes de las manchas.
Diagnóstico y tratamiento
Para diagnosticar la alopecia de la barba, se observan muestras de cabello caído bajo un microscopio, aunque hay casos en donde es necesario realizar una biopsia del cuero cabelludo. También se pueden llevar a cabo análisis de sangre para detectar signos de infección o la presencia de una enfermedad autoinmune asociada.
A pesar de que no existe una cura definitiva para la alopecia de la barba, existen opciones de tratamiento que pueden ayudar a reducir los síntomas y promover el crecimiento del cabello en las áreas afectadas. Entre los tratamientos disponibles podemos encontrar:
- Corticosteroides: Se pueden administrar en forma de cremas o inyecciones con el fin de bloquear la respuesta del sistema inmunitario.
- Vasodilatadores: Agentes tópicos como el minoxidil, que estimula el crecimiento del cabello.
- Antralina: Compuesto derivado del ácido crisarofánico que se utiliza en forma de pomada para tratar la alopecia y otras afecciones dermatológicas.
- Terapia con luz ultravioleta: Puede ayudar a reducir la inflamación y promover la regeneración del cabello.
En los casos más graves, pueden formularse ciertos fármacos por vía oral, como corticosteroides y metotrexato (un medicamento contra el cáncer). De igual forma, es importante que las personas afectadas por la alopecia de la barba consulten a un especialista en dermatología para determinar el tratamiento más adecuado para su caso específico.
