El 5 de enero de 2021, Thomas se preparó su bebida con cafeína, utilizando una balanza de cocina para medir la cantidad de polvo que debía agregar. Sin embargo, cometió un error crucial al calcular la dosis, ingiriendo el equivalente en cafeína de 200 tazas de café. Poco después de beberla, comenzó a sentir un dolor agudo en el pecho debido a los latidos acelerados de su corazón. En un intento por calmarse, se recostó, pero momentos después, comenzó a salivar espuma y su corazón estaba al borde del colapso.
La tragedia y el error fatal
Su esposa rápidamente llamó a una ambulancia y Thomas fue trasladado de emergencia al hospital de Bodelwyddan, en Gales. A pesar de los intensos esfuerzos del personal médico durante 45 minutos de masaje cardíaco, no pudieron reanimarlo y Thomas falleció debido a una sobredosis de cafeína. La prueba post mortem reveló que tenía 362 miligramos de cafeína por litro de sangre, una cantidad extremadamente alta en comparación con los niveles normales en una persona que consume una taza de café.
La importancia de la dosificación adecuada
El error fatal cometido por Thomas radicó en la falta de precisión al preparar su bebida. La empresa que vendía el polvo de cafeína utilizado por el joven establecía que no se debían consumir más de 60 a 300 miligramos de polvo, y no más de dos veces al día. Sin embargo, al utilizar una balanza de cocina cuya sensibilidad oscilaba entre 2 y 5,000 gramos, le resultaba imposible medir la cantidad correcta de miligramos de cafeína.
La cafeína y sus efectos secundarios
Esta sustancia es un estimulante ampliamente consumido en todo el mundo y tiene efectos que han sido objeto de numerosos estudios científicos. Esta molécula psicotrópica bloquea los receptores de adenosina en el cerebro, lo que conduce a una mayor actividad cognitiva. Los consumidores de café a menudo experimentan una sensación de mayor alerta, agudeza mental y capacidad para concentrarse durante períodos más prolongados.
Sin embargo, es fundamental consumir cafeína con moderación. A largo plazo, la cafeína puede inducir cambios neurológicos en el hipocampo, una región cerebral relacionada con la memoria, según un estudio del Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica (Inserm) y el Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS). Se recomienda no exceder los 400 miligramos de cafeína al día, lo que equivale a aproximadamente dos o tres tazas de café de 250 ml. Además, se desaconseja su consumo en personas con insuficiencia cardíaca debido a su supuesta capacidad para alterar el ritmo cardíaco.
Los peligros del polvo de cafeína
Es importante destacar que el polvo de cafeína utilizado por los deportistas es altamente concentrado e incluso puede ser puro, lo que aumenta el riesgo de sobredosis en comparación con el café. Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, una cucharadita de polvo de cafeína contiene aproximadamente la misma cantidad de cafeína que 28 tazas de café. En dosis elevadas, la cafeína puede desencadenar arritmias cardíacas, malestar general, vómitos y diarrea, llegando a ser mortales en algunos casos. Afortunadamente, estos incidentes son poco frecuentes, aunque no imposibles.
Conclusiones y advertencias
La trágica muerte de Thomas es un recordatorio impactante de los peligros de una dosificación inadecuada de la cafeína. Tanto el consumo excesivo de cafeína en general como la falta de precisión al utilizar polvo de cafeína pueden tener consecuencias graves para la salud. Es fundamental seguir las recomendaciones de dosificación proporcionadas por los fabricantes y tener cuidado al preparar bebidas o suplementos usando este tipo de productos.
Además, se debe tener en cuenta que los efectos pueden variar de una persona a otra, y cada individuo debe conocer sus propias tolerancias y limitaciones. Siempre es aconsejable consultar a un profesional de la salud antes de iniciar cualquier régimen o consumo de productos que contengan cafeína, especialmente si se tienen condiciones de salud preexistentes.
En resumen, cuando se consume con moderación y siguiendo las pautas recomendadas, puede ofrecer beneficios estimulantes, pero su mal uso o dosificación inadecuada puede tener consecuencias graves e incluso mortales. La historia de Thomas nos recuerda la importancia de ser conscientes de nuestros hábitos y decisiones relacionadas con la cafeína y buscar un equilibrio saludable en su consumo.