El aloe vera, también reconocido como la «planta milagrosa», es una planta perenne que se caracteriza por carecer de tallo. Sus hojas son largas, estrechas y presentan bordes dentados. Una de las particularidades más destacadas del aloe vera es su composición, ya que aproximadamente el 99% de su contenido es agua, mientras que el restante 1% está compuesto por alrededor de 75 componentes activos, incluyendo vitaminas, enzimas y minerales. Para su cosecha, generalmente se requieren entre cuatro y cinco años de crecimiento. Este gel, se utiliza ampliamente en la formulación de bebidas y, especialmente, en productos cosméticos debido a sus numerosos beneficios.
El aloe vera es un tesoro natural con múltiples beneficios para la salud humana: puede ser utilizado para mejorar la coagulación sanguínea, aliviar úlceras, tratar el estreñimiento ocasional y reducir la inflamación, aunque también es eficaz cuando se aplica directamente sobre la piel para tratar diversos problemas, como las quemaduras de sol, gracias a sus propiedades regeneradoras y calmantes que ayudan a aliviar las rojeces y acelerar la curación. Además, el aloe vera posee propiedades cicatrizantes, por lo que se puede aplicar sobre heridas leves como un antiinflamatorio natural.
¿Cómo podemos utilizar el aloe vera durante el verano?
Para preparar una bebida
Para preparar un zumo de aloe vera, primero coloca el gel de aloe vera en una licuadora, luego, añade miel de flores, la cual potenciará los beneficios de la planta. Tritura la mezcla hasta obtener una textura líquida y homogénea.
Beneficios para la piel y el cabello
La extracción del gel de aloe vera es un proceso sencillo. Simplemente, necesitas cortar una hoja de la planta y, utilizando unas tijeras, eliminar las espinas. Después, aclara la hoja con agua y córtala por la mitad. A continuación, puedes raspar el gel (una sustancia gelatinosa y transparente) del interior de la hoja utilizando una cuchara u otro utensilio similar. Una vez obtenido el gel, puedes aplicarlo directamente sobre la piel una o dos veces al día, o incluso utilizarlo en el cabello.
¿Hay algún tipo de contraindicación o efecto secundario?
Si se consume en cantidades excesivas, el aloe vera puede tener un efecto laxante y provocar diarrea. Por lo tanto, es importante moderar su consumo y seguir las recomendaciones de dosificación adecuadas. Además, al aplicar gel de aloe vera sobre la piel, es crucial evitar la exposición directa a la luz solar. Esto se debe a que la planta tiene propiedades fotosensibilizantes, lo que significa que aumenta la sensibilidad de la piel a los rayos solares.
Aunque el gel de aloe vera es conocido por sus propiedades beneficiosas, es importante tener en cuenta que algunos de sus componentes pueden resultar tóxicos cuando se consumen internamente, especialmente en grandes cantidades y de forma regular. Uno de estos componentes es la aloína, un látex amarillo que se encuentra en la capa externa de la planta.
La ingestión excesiva de aloína puede provocar intoxicación. Sin embargo, es importante destacar que estos efectos son relativamente raros, ya que la mayoría de los productos de aloe vera disponibles en tiendas se venden sin aloína. Por lo tanto, si se cultiva una planta de aloe vera en casa, no se recomienda consumir el jugo puro, puesto que puede contener esta sustancia potencialmente tóxica. Es mejor optar por productos comerciales que estén libres de aloína para garantizar la seguridad en su uso.