Las poses sexuales favoritas de los infieles
La infidelidad es un fenómeno que ha existido desde tiempos inmemoriales y continúa siendo una parte de las relaciones humanas. Aunque siempre es objeto de discusión y análisis, las dinámicas que rodean a las relaciones extramaritales son menos conocidas. En un intento de arrojar luz sobre este tema, se realizaron encuestas a hombres y mujeres infieles para descubrir cuáles son sus posiciones sexuales favoritas con sus amantes y cómo se comparan con las que practican con sus parejas estables.
La infidelidad y la satisfacción sexual
Los expertos argumentan que una razón común detrás de la infidelidad es la insatisfacción sexual o emocional en la relación estable. Esto puede llevar a la persona a buscar satisfacción fuera de su relación actual. Sin embargo, se debe destacar que la infidelidad no es simplemente el resultado de una relación insatisfecha, es un comportamiento complejo que puede ser influenciado por una multitud de factores, incluyendo la personalidad individual, el entorno social y cultural, y la dinámica de la relación.
Posiciones sexuales favoritas de los infieles
Posición del perrito
La posición del perrito es la favorita tanto para hombres (49%) como para mujeres (55%) cuando tienen relaciones sexuales con sus amantes. Esta posición, en la que la mujer se coloca en cuatro y el hombre la penetra por detrás, parece ser especialmente popular entre las personas infieles.
La vaquera
La segunda posición más popular entre los hombres infieles es «La Vaquera», donde la mujer se sienta encima del hombre. Esta posición permite a la mujer controlar el ritmo y la profundidad de la penetración, lo que puede ser especialmente excitante para algunos hombres.
El misionero
Aunque a veces se considera una posición sexual «básica» o «tradicional», el Misionero sigue siendo popular entre los hombres y las mujeres infieles. En esta posición, el hombre está encima y la mujer debajo, lo que puede permitir una mayor intimidad y contacto visual.
Piernas al hombro
Esta posición, en la que la mujer coloca sus piernas sobre los hombros del hombre, es otra de las favoritas entre las personas infieles. Esta posición puede permitir una penetración más profunda y también puede ser muy excitante para ambas partes.
Las diferencias entre las parejas estables y los amantes
Es interesante notar que las posiciones sexuales favoritas de las personas infieles con sus amantes difieren de las que practican con sus parejas estables. Con sus parejas estables, la posición más común es el Misionero, mientras que con sus amantes, la posición del perrito es la más popular.
La voluntad de experimentar
Además, las personas infieles parecen estar más dispuestas a experimentar nuevas posiciones sexuales con sus amantes. Según los datos, el 93% de las personas infieles están dispuestas a probar nuevas posiciones con sus amantes, en comparación con solo el 51% que está dispuesto a hacerlo con sus parejas estables.
El uso de juguetes sexuales
El uso de juguetes sexuales es otra área en la que las personas infieles parecen ser más aventuradas con sus amantes. El 60% de las personas infieles dice estar dispuesto a usar juguetes sexuales con sus amantes, comparado con solo el 36% que dice estar dispuesto a hacerlo con sus parejas estables.
Juegos de rol
Los juegos de rol son otra actividad que parece ser más común entre las personas infieles y sus amantes. El 45% de las personas infieles dice participar en juegos de rol con sus amantes, en comparación con solo el 17% que dice hacerlo con sus parejas estables.
Sexo oral
El sexo oral es otro aspecto del comportamiento sexual que parece ser más frecuente entre las personas infieles y sus amantes. El 94% de las personas infieles dice que su amante les practica sexo oral, en comparación con solo el 65% que dice que su pareja estable lo hace.
Características de un hombre infiel
Narcisismo
Los hombres infieles suelen tener una tendencia hacia el narcisismo, lo que significa que ponen sus necesidades y deseos por encima de los demás. Ven a las mujeres como objetos y no les importan los sentimientos de su pareja. Para ellos, la relación es simplemente una forma de satisfacer sus propios deseos y obtener beneficios personales.
Búsqueda de mujeres independientes
los hombres infieles tienden a buscar mujeres independientes, ya que esto les garantiza una vida cómoda y llena de lujos. Prefieren a personas que sean propensas a justificar o pasar por alto sus infidelidades, lo que les permite mantener varias relaciones simultáneamente sin enfrentar consecuencias graves.
Falta de demostración de amor en público
Un hombre infiel suele evitar mostrar afecto en público, como abrazar o besar a su pareja, por temor a que sus amantes descubran su engaño. Esto se debe a que el hombre infiel desea mantener una imagen de soltería o disponibilidad para otras posibles conquistas.
Miedo al compromiso y al abandono
Los hombres infieles suelen tener miedo de comprometerse en una relación a largo plazo, ya que disfrutan de la emoción de tener múltiples parejas y temen ser abandonados o engañados por su pareja actual.
Baja autoestima
A pesar de su aparente seguridad y confianza, los hombres infieles suelen tener una baja autoestima. Buscan constantemente la validación y elogios de otras personas para reforzar su sentido de valía personal. Tener múltiples parejas les brinda una sensación temporal de poder y satisfacción.
Encanto inicial
Los hombres infieles pueden ser encantadores y seductores al comienzo de una relación. Utilizan su habilidad para cautivar a las mujeres y ocultar sus verdaderas intenciones. Esta fase de conquista es clave para mantener varias relaciones a la vez.
Desprecio hacia el matrimonio
Los hombres infieles generalmente desprecian la idea del matrimonio y evitan comprometerse. Ven el matrimonio como una restricción a su libertad y desean mantener su capacidad de tener relaciones con diferentes personas sin enfrentar responsabilidades legales o emocionales.
Búsqueda constante de reafirmación
La baja autoestima de los hombres infieles los lleva a buscar constantemente la reafirmación de su atractivo y valía a través de múltiples parejas. Necesitan sentirse deseados y admirados para compensar sus inseguridades internas.