Las estafas relacionadas con anuncios falsos en las redes sociales ha aumentado en los últimos años. Según la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, en 2021 más de 95,000 personas reportaron pérdidas por un total de 1.05 mil millones de dólares debido a fraudes en las redes sociales. Esta cifra es 18 veces mayor que la reportada en 2018. Es alarmante, ¿verdad?
¿Cómo identificar un anuncio falso en las redes sociales?
Muchas personas que han caído en el engaño de un anuncio falso en las redes sociales no lo reportan, lo cual dificulta tener datos precisos sobre la magnitud del problema. Paul Bischoff, experto en privacidad de Comparitech, advierte que incluso los anuncios legítimos pueden ser clonados y utilizados con fines maliciosos. En ocasiones, no queda más opción que hacer clic en el anuncio para determinar si es auténtico o no. Sin embargo, en caso de duda, es mejor abstenerse de hacerlo. Además, es posible ocultar el nombre de dominio de un sitio web, por lo que nunca se sabe a dónde puede llevar un anuncio.
Las víctimas más propensas a las estafas
Aunque los adultos mayores suelen ser las principales víctimas de las estafas en línea, en 2021 fueron las personas de entre 18 y 39 años las que perdieron la mayor cantidad de dinero debido a anuncios falsos en las redes sociales. Si observamos las tendencias pasadas, es probable que este tipo de engaños afecte cada vez a más personas y son muy comunes en línea y en plataformas como Facebook.
Señales de advertencia para evitar estafas en las redes sociales
La oferta es demasiado buena para ser verdad: en muchas ocasiones, las ofertas que parecen demasiado buenas para ser verdad resultan ser fraudulentas. Es más seguro confiar en tiendas físicas reconocidas, en lugar de confiar en promociones, concursos o anuncios sospechosos en Instagram o Facebook.
Precios ridículamente bajos: si un anuncio ofrece grandes descuentos en productos de marcas conocidas, es probable que sea una estafa. Los productos de marcas reconocidas rara vez se ofrecen a precios bajos, a menos que se trate de un esquema fraudulento.
Verifica la URL: si haces clic en un anuncio en las redes sociales y te lleva a un sitio web, verifica la URL. Si no comienza con «https://», es una señal de alarma de que podrías estar en un sitio de compras en línea fraudulento. Los sitios web legítimos de comercio electrónico suelen tener URL que comienzan con «https://». Presta especial atención si el sitio web supuestamente pertenece a una empresa conocida o a una gran empresa internacional.
No compartas tu número de tarjeta de crédito rápidamente: si una empresa te solicita tus datos bancarios antes de que estés listo para realizar una compra, o si te envía un mensaje privado solicitando tu número de tarjeta de crédito, es una señal de advertencia importante. Los estafadores utilizan esta información para acceder a tu cuenta bancaria.
Cuidado con las cuentas sospechosas que te siguen: algunos estafadores crean cuentas falsas en Instagram para generar interacción en sus publicaciones, las cuales pueden parecer auténticas, pero los impostores suelen seguir o contactar a sus posibles víctimas en las redes sociales. Si recibes algún mensaje de una cuenta sospechosa, verifica cuidadosamente el nombre de usuario, y si ves caracteres especiales o letras duplicadas, es probable que la cuenta sea fraudulenta.
La imposibilidad de comentar en una publicación: si una empresa impide que los usuarios comenten en sus publicaciones en las redes sociales, es una señal de advertencia de que podría tratarse de una estafa. A menudo, esto se hace para evitar que los consumidores insatisfechos hagan preguntas o se quejen sobre la calidad de un producto que han comprado. Sin embargo, también es posible que una empresa legítima desactive los comentarios en una publicación sobre un tema controvertido para evitar generar contenido negativo.
La imagen parece legítima: los estafadores tienen acceso a herramientas cada vez más sofisticadas que les permiten piratear computadoras, instalar software espía, robar identidades y recrear casi cualquier logotipo o imagen. A simple vista, puede resultar difícil detectar inconsistencias, por lo que no te fíes únicamente de la apariencia de un anuncio o de su sitio web, ya que los estafadores son cada vez más habilidosos a la hora de usurpar la identidad de marcas legítimas.
Exceso de opiniones positivas sobre el producto: aunque pueda parecer contradictorio, un exceso de reseñas positivas sobre un producto puede ser una señal de advertencia. Si solo ves críticas extremadamente positivas que parecen haber sido escritas por robots, debes tener cuidado, especialmente si están asociadas a una oferta demasiado buena para ser verdad.
Pocos hashtags: los hashtags tienen la función de generar interacción en las redes sociales de una empresa. Si una publicación no utiliza hashtags, puede parecer sospechoso. Por ejemplo, si alguien vende zapatos falsos de Nike, es poco probable que utilice el hashtag #Nike, ya que sería fácilmente identificado como fraude.
Recuerda que es importante estar siempre alerta y utilizar el sentido común al realizar compras en línea.
