La razón psicológica por la que enviamos mensajes de texto obsesivamente a personas que nos ignoran
A pesar de nuestros esfuerzos por resistir la tentación de llamar, escribir o enviar mensajes a nuestra ex pareja, a menudo nos encontramos cediendo a esta pulsión de manera obsesiva. Nos damos cuenta de que nuestro comportamiento es embarazoso y que nuestros amigos hacen todo lo posible por ayudarnos a no caer en esta tentación. Sin embargo, nos sentimos completamente fuera de control y nos preguntamos por qué continuamos enviando mensajes a alguien que ya no comparte nuestros sentimientos.
Afortunadamente, existe una explicación psicológica. Las rupturas amorosas pueden desencadenar una mezcla de emociones complejas e intensas que a veces resulta difícil de manejar. El envío compulsivo de mensajes a nuestra ex pareja puede ser el resultado de la dificultad para dejar ir esa relación, ya que fue una parte importante de nuestras vidas.
La razón psicológica
La razón psicológica por la cual continuamos enviando mensajes de manera obsesiva a alguien que nos ignora se conoce como «explosión de extinción». Este fenómeno se refiere a un comportamiento que anteriormente fue reforzado o aprendido (por ejemplo, el envío de mensajes de texto a la persona que amamos) que aumenta temporalmente cuando se elimina el refuerzo de ese comportamiento (por ejemplo, cuando la persona amada ignora los mensajes después de una ruptura).
Según la teoría del aprendizaje, la persona involucrada (es decir, nosotros) aumenta la frecuencia del comportamiento (los mensajes obsesivos) en un intento de recuperar el refuerzo inicial del comportamiento (es decir, obtener una respuesta de la persona amada). Sin embargo, si el refuerzo no se restablece, el comportamiento eventualmente disminuye (es decir, nos damos cuenta de que la persona no responderá y debemos seguir adelante).
Imaginemos que todos los días tomamos el ascensor para ir al trabajo. Entramos, presionamos el botón para el piso 20 y generalmente las puertas se cierran y llegamos a nuestro destino sin problemas. Sin embargo, un día, cuando entramos en el ascensor y presionamos el botón, nada sucede.
En una situación como esta, es probable que no digamos: «Bueno, este ascensor debe estar averiado y simplemente tomaré las escaleras hasta el piso 20. No importa». No, esa no sería nuestra reacción típica.
Lo que es más probable que hagamos es presionar el botón nuevamente, tal vez varias veces, con la esperanza de que funcione esta vez. Incluso podríamos intentar presionar otros botones, cambiar el orden de nuestras acciones o presionar con más fuerza y rapidez, todo con la esperanza de desencadenar la respuesta familiar que estamos acostumbrados a ver.
La buena noticia es que cuando persistimos en llamar y enviar mensajes a nuestra ex pareja, incluso sabiendo que deberíamos detenernos, estamos dando el primer paso hacia la extinción de este comportamiento. Si nuestra ex pareja nunca responde o no nos ofrece ningún signo de refuerzo positivo, eventualmente dejaremos de intentar contactarlos. Solo tenemos que atravesar este período de extinción para superar la necesidad de contacto y alcanzar un estado de indiferencia.
Supera la tentación de contactar a tu ex
Ahora que comprendemos por qué podemos sentirnos atraídos por personas que no comparten nuestros sentimientos y por qué tendemos a enviar mensajes de manera obsesiva a nuestras ex parejas cuando nos ignoran, es posible que consideremos eliminar toda la información de contacto de nuestra ex pareja y bloquearla en Facebook, Instagram y otras redes sociales en las que interactuamos.
A continuación, te ofrecemos algunos consejos para ayudarte a resistir la tentación:
Elimina los contactos y bloquea en las redes sociales
Eliminar los contactos de nuestra ex pareja y bloquearla en las redes sociales puede ser una forma de evitar la tentación de contactarla. Al no tener acceso a su perfil y publicaciones, reducimos la posibilidad de ver cosas que puedan desencadenar emociones negativas o impulsos de enviar mensajes.
Busca apoyo emocional
Es importante rodearnos de amigos y familiares que nos brinden apoyo emocional durante este proceso de superar a nuestra ex pareja. Compartir nuestros sentimientos y pensamientos con personas de confianza puede ayudarnos a procesar nuestras emociones y a encontrar una perspectiva más objetiva.
Establece límites con tus amigos
Si nuestros amigos están al tanto de nuestra lucha por resistir la tentación de enviar mensajes a nuestra ex pareja, podemos pedirles que nos ayuden estableciendo límites. Por ejemplo, pueden quitarnos el teléfono cuando estamos tentados a enviar mensajes después de haber bebido o cuando nos aburrimos. Su apoyo puede ser fundamental para evitar recaídas.
Ocúpate de actividades que te apasionen
En lugar de centrar nuestra energía en pensar en nuestra ex pareja y en enviar mensajes obsesivos, es importante ocuparnos de actividades que nos apasionen y que nos hagan sentir bien. Ya sea hacer ejercicio, aprender algo nuevo o dedicarnos a un hobby, enfocarnos en nuestras propias metas y disfrutar de nuestro tiempo libre puede ayudarnos a desviar nuestra atención de la tentación de contactar a nuestra ex pareja.
Busca ayuda profesional si es necesario
Si a pesar de nuestros esfuerzos, seguimos luchando por superar la tentación de enviar mensajes obsesivos a nuestra ex pareja, puede ser beneficioso buscar ayuda profesional. Un psicólogo o terapeuta especializado en relaciones de pareja puede proporcionarnos herramientas y estrategias para enfrentar y superar esta etapa difícil.