Las mujeres a menudo experimentan dolores menstruales intensos, pero en el caso de Faye Louise, resultó ser algo mucho más grave. A sus 39 años, Faye siempre había sufrido de períodos abundantes y cólicos menstruales dolorosos, pero se preocupó cuando el dolor se extendió una semana antes y después de su período a principios de este año.
Los primero síntomas y el diagnóstico inicial
Después de someterse a una ecografía y una tomografía computarizada en marzo de 2023, Faye Louise, originaria de West Sussex, descubrió que tenía un quiste de 17 cm en su ovario izquierdo que estaba creciendo en su estómago, y también tenía el apéndice inflamado.
Aunque el quiste resultó ser benigno, los médicos descubrieron un segundo tumor canceroso en el apéndice mientras estaba en la sala de operaciones. Según ella, antes de la operación no había indicios de ningún cáncer y este diagnóstico repentino hizo que su mundo se derrumbara y la angustia se apoderara de ella.
«Cuando me lo dijeron después de la cirugía, sentí que mi mundo se derrumbaba. Perdí a mi madre por cáncer de colon hace dos años, por lo que mi primer pensamiento fue que esto era el fin para mí, la historia se estaba repitiendo. Tenía ataques de pánico con frecuencia. Fueron los peores días y semanas de mi vida. Estaba mirando planes funerarios y le dije a mi pareja Will que no viviría para ver los 45 o 50 años.»
El tipo de cáncer: pseudomixoma peritoneal
Aunque los médicos inicialmente decidieron dejar el quiste porque el cáncer estaba contenido, había un riesgo de que el cáncer perforara la pared del apéndice y se extendiera, convirtiéndose en un cáncer extremadamente raro y maligno conocido como pseudomixoma peritoneal (PMP).
Desafortunadamente, el tumor terminó rompiéndose, propagando un neoplasma mucinoso de bajo grado por todo su cuerpo, lo que provocó que el cáncer se convirtiera en un PMP potencialmente mortal.
«Mi médico me mostró mis escaneos y me dijo que el cáncer se había extendido por la zona peritoneal (la membrana que recubre la cavidad abdominal)», dijo Faye Louise, quien fue referida al Hospital Basingstoke y North Hampshire en septiembre de 2023. «Me dijo que el tratamiento propuesto era una operación muy extensa y que tendrían que extirpar varios órganos. Luego, se aplicaría quimioterapia con calor directamente en el abdomen. Es la poción mágica que mata cualquier cáncer que los cirujanos no pueden ver».
¿Qué es el pseudomixoma peritoneal (PMP)?
Según el sitio web de Cancer Research, el pseudomixoma peritoneal (PMP) es un tipo muy raro de cáncer que generalmente comienza como un crecimiento en el apéndice, pero también puede comenzar en los intestinos, los ovarios o la vejiga. Este crecimiento puede extenderse a través de la pared del apéndice (u otros órganos), propagando células cancerosas en el revestimiento de la cavidad abdominal.
Los síntomas del PMP incluyen:
- Dolor abdominal o pélvico
- Dificultad para quedar embarazada
- Hinchazón abdominal
- Cambios en los hábitos intestinales
- Hernia (protuberancia en la pared abdominal o en la ingle)
- Pérdida de apetito
- Sensación de saciedad
La operación implicó la extracción de ocho órganos, incluyendo su vesícula biliar, bazo, apéndice, intestino delgado (que fue reconectado a su colon), ovarios, útero, parte de su hígado y su cavidad abdominal peritoneal.
Afortunadamente, la operación fue exitosa y Faye ahora está libre de cáncer, pero está pasando por la menopausia temprana y necesitará de tres a seis meses para recuperarse de la cirugía.
«Solo quiero mirar hacia adelante. Estoy emocionada de pasar la Navidad con mi familia y quiero disfrutar cada momento en mi vida. Siento que me he enfrentado a la muerte cara a cara. Tuve cáncer durante cuatro o cinco años antes de ser diagnosticada y no tenía idea, sin ningún síntoma. Algunos días simplemente no puedo creer que haya pasado por esto y que todo comenzó con un quiste».
La mujer está en proceso de recuperación con el apoyo de su pareja, Will. A través de su experiencia, quiere crear conciencia sobre su tipo específico de cáncer y sobre el trabajo que se realiza en el Hospital Basingstoke y North Hampshire, especializado en PMP.
