Muchas personas anhelan mantener una silueta equilibrada, ni demasiado delgada ni demasiado robusta. Sin embargo, el cuerpo humano adopta formas independientemente de nuestras preferencias estéticas. No es raro encontrar a individuos incómodos con los volúmenes en su rostro, buscando desesperadamente soluciones para deshacerse de esos excesos de grasa y recuperar un aspecto facial más definido.
Tratamiento integral para adelgazar el rostro
Según diversos enfoques, el cuerpo humano debe considerarse como un todo, por lo que sería difícil atacar una zona específica para hacerla perder grasa. Aunque es posible trabajar partes del cuerpo de manera individualizada a través de ejercicios, para afinar el rostro se requiere una solución más integral.
Para adelgazar el rostro, es necesario trabajar el cuerpo en su conjunto. Esto implica realizar los ejercicios habituales para disipar la obesidad de todo el organismo, como practicar ciclismo, caminar largas distancias o nadar. Estas actividades hacen que el metabolismo recurra a las reservas de grasa para generar la energía necesaria, lo que inevitablemente tendrá un impacto positivo en la forma del rostro.
Al reducir el volumen corporal general, se observarán resultados evidentes en el rostro, sin haber trabajado exclusivamente esta zona. Sin embargo, también existen enfoques más específicos para disminuir la redondez facial.
Tratamiento individualizado enfocado en la forma del rostro
Además del abordaje integral, hay diversas formas de actuar directamente sobre el rostro para lograr su adelgazamiento, por lo que no es necesario trabajar todo el cuerpo en su totalidad.
Hacer muecas
Realizar muecas puede parecer una práctica algo desconcertante, pero su eficacia es innegable. Estas expresiones faciales permiten redefinir la forma ovalada del rostro, tonificar los músculos y, sobre todo, esculpir las mejillas. Para lograrlo, se debe:
- Mantener la boca cerrada.
- Intentar tocar la nariz con la lengua sin abrir la boca.
- Sostener esta posición durante 15 segundos.
- Repetir este ejercicio alrededor de 10 veces.
- Cerrar la boca nuevamente, succionar las mejillas sin soltarlas durante al menos 10 segundos, y repetir varias veces.
Masticar constantemente
El objetivo de este ejercicio es trabajar los músculos del cuello, de modo que se elimine la papada. Para llevarlo a cabo, se debe:
- Mantener la cabeza erguida o ligeramente echada hacia atrás.
- Cerrar la boca y mover la mandíbula inferior hacia adelante.
- Sostener esta posición durante al menos 10 segundos.
- Repetir el gesto al menos 5 veces seguidas.
Además, masticar chicle durante al menos 10 minutos al día también puede ayudar a adelgazar el rostro. Sin embargo, es importante evitar los chicles con azúcar, ya que pueden provocar un aumento de peso.
Sonreír con frecuencia
La sonrisa, un acto sencillo y cotidiano, puede tener sorprendentes efectos positivos. Se ha demostrado que sonreír puede contribuir a adelgazar el rostro, actuando sobre las mejillas y haciéndolas más estrechas. Por ello, se recomienda a las personas con rostros regordetes sonreír tanto como sea posible, incluso sin motivo aparente.
Al sonreír con la intención de adelgazar el rostro, se debe procurar extender la sonrisa hasta las orejas y mantener esta posición durante aproximadamente 15 segundos. Además, es aún más efectivo elevar las mejillas hacia los ojos durante la sonrisa, lo cual ayudará a disminuir la redondez de las mejillas.
La técnica de imitar al pez
Otra técnica para modelar las mejillas consiste en imitar al pez. Este animal tiene una boca puntiaguda, y al imitarlo, succionando profundamente las mejillas y reteniéndolas durante más de 10 segundos, se puede lograr que estas se afinen y pierdan prominencia.
Prácticas complementarias para adelgazar el rostro
Además de los ejercicios mencionados, existen otras prácticas que pueden contribuir a la pérdida de peso facial. Entre ellas, se destacan:
Hidratación adecuada
Una persona con rostro regordete debe hidratarse regularmente y de manera suficiente, bebiendo al menos 1,5 litros de agua al día. Esto ayuda a perder peso y evita que se vuelva a recuperar.
Lavado frecuente del rostro
Lavar el rostro con agua fresca con frecuencia favorece la circulación sanguínea y la eliminación de las acumulaciones de grasa.
Masaje facial con Gua Sha
El masaje facial con la piedra natural Gua Sha puede ser una técnica efectiva para descongestionar y esculpir el rostro, además de relajar y aliviar el estrés.
Deporte y ayuno
Practicar deporte y realizar ayunos intermitentes son otros métodos que pueden contribuir a la pérdida de peso a nivel corporal y, por ende, facial.
