Una maestra se convierte en la heroína de un niño de 5 años al donar su hígado para salvarle la vida
Un niño de 5 años que necesitaba un trasplante de hígado recibió la sorpresa de su vida cuando su ex maestra de guardería se ofreció como donante y se presentó en su casa con globos y un oso de peluche. Esta conmovedora historia de generosidad y compasión ha conmovido a miles de personas en todo el mundo.
La conexión especial entre Ezra y Carissa
Ezra Toczek, un niño de 5 años, había sido acogido por la familia Toczek cuando tenía solo 7 meses. Nacido con problemas de salud, se sabía que Ezra podría necesitar un trasplante de hígado en el futuro. Carissa Fisher, su antigua maestra de la guardería Precious People, recordaba a Ezra como «una bola de energía» en su salón de clases. «Éramos bastante cercanos», dice Carissa. «Muchos niños de acogida necesitan encontrar un apoyo y terminé siendo esa roca para Ezra».
Cuando Karen Toczek, la madre adoptiva de Ezra, compartió una publicación en Facebook en busca de un donante de hígado, Carissa, ahora de 21 años, no lo pensó dos veces. «Mi hermano inicialmente pensó que estaba un poco loca y mi mamá dijo: ‘Tenemos que sentarnos y pensar en eso’, pero ni siquiera hubo una segunda oportunidad», cuenta Carissa. «Tenía los medios para ayudar a este niño, tenía que ayudarlo, y si yo tuviera 5 años, querría que alguien lo hiciera por mí… No tenía ni la más mínima duda».
La sorpresa en casa de los Toczek
Carissa mantuvo en secreto su solicitud de donación, sin querer levantar falsas esperanzas. Así que cuando llegó a la casa de los Toczek con globos y un oso de peluche, la reacción de Karen fue de puro asombro: «¿En serio?», exclamó. Carissa se arrodilló frente a Ezra y le mostró un cartel que decía: «Oye Ezra, ¿te gustaría compartir mi hígado?», a lo que el niño respondió con entusiasmo marcando la casilla «Sí».
Carissa pasó meses realizándose pruebas médicas para asegurarse de ser una coincidencia. Finalmente, el 24 de mayo, recibió la llamada que estaba esperando: ¡era una donante compatible! El 7 de agosto, Carissa y Ezra entraron al quirófano para la cirugía de trasplante. Según Carissa, los médicos extrajeron aproximadamente el 30% de su hígado, que se espera que se regenere en menos de un año.
La cirugía fue un éxito, pero Ezra tuvo que pasar 45 días en la UCI y someterse a tres cirugías más. Carissa recuerda haberlo visto «riendo, sonriendo y contando chistes» durante sus visitas en el hospital. Ezra fue dado de alta el 20 de septiembre y se mudó a una Casa Ronald McDonald cerca de su equipo médico para recibir atención de seguimiento. Aunque tuvo que ser readmitido más tarde por preocupaciones en sus análisis de sangre, la familia Toczek espera con ansias el próximo capítulo de su recuperación.
Karen Toczek describe la generosidad de Carissa como algo que va más allá de lo extraordinario. «Lo que Carissa hizo por Ezra y nuestra familia no es algo excepcional, es simplemente quién es ella», dice Karen. «Ella es altruista en todas las áreas… me dijo: ‘Voy a mantener un ojo en Ezra y asegurarme de que cuide de su hígado'».
La importancia de los trasplantes de órganos
Esta historia pone de relieve la crucial importancia de los trasplantes de órganos, especialmente para niños como Ezra que nacen con enfermedades crónicas. Cada año, miles de personas en todo el mundo necesitan un trasplante desesperadamente, y la generosidad de donantes como Carissa puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
La valentía y el altruismo de Carissa han inspirado a muchos. A sus 21 años, demostró un nivel de madurez y compasión que trasciende su edad. Su historia es un recordatorio de que incluso los actos más pequeños de bondad pueden tener un impacto enorme en la vida de los demás.
