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Cocina, recetas y alimentos

Las 2 mejores opciones de pizza para no subir de peso

¿Quién no ama la pizza? Es casi imposible resistirse a su delicioso aroma y a su combinación perfecta de sabores. Sin embargo, muchos evitan disfrutar de este placer culinario por miedo a las calorías. No todo está perdido, existen alternativas saludables que permiten saborear una pizza sin culpa.

Pizza de calabacín

El calabacín es una de las verduras más versátiles en la cocina, conocida por su capacidad de adaptarse a numerosas recetas sin perder sus propiedades benéficas para la salud. Una de las opciones más interesantes es la pizza de calabacín, que combina sabor y salud en un plato irresistible y amigable con la cintura.

El calabacín es una joya nutritiva que alberga grandes ventajas para quienes buscan mantener un peso saludable. Por cada 250 gramos, aporta unas escasas 48 calorías, acompañado de una generosa dosis de fibra, ideal para prolongar la sensación de saciedad. Este vegetal está cargado de nutrientes esenciales como ácido fólico, potasio y vitamina C, además de contener vitaminas del grupo B. Entre sus otros beneficios, tenemos:

Bajo en calorías: perfecto para incluir en dietas de control de peso.

Alto contenido de fibra: favorece la digestión y combate el estreñimiento.

Rico en vitaminas y minerales: proporciona antioxidantes que mejoran la salud general.

Preparación de la base de pizza de calabacín

Elaborar una base de pizza con calabacín es sencillo y rápido. Aquí, se describe cómo conseguir una corteza deliciosa y saludable:

Ingredientes:

  • 2 calabacines medianos
  • 1 taza de queso mozzarella rallado (duro)
  • 1 huevo grande
  • 1 cucharadita de sal

Instrucciones:

  • Precalentar el horno a 200 °C.
  • Lavar y rallar los calabacines. Colocarlos en un colador y presionar para eliminar el exceso de agua.
  • En un bol grande, mezclar los calabacines rallados con el huevo, el queso mozzarella y la sal.
  • Lee también:
  • Extender la mezcla sobre papel para hornear en una bandeja, formando la base de la pizza.
  • Hornear durante 20 minutos o hasta que la corteza esté dorada.
  • Retirar del horno y dejar enfriar antes de añadir los ingredientes de la pizza al gusto.

Así, no solo se obtiene una base de pizza libre de culpa, sino también una experiencia culinaria que deleita el paladar sin remordimientos.

Pizza de vegetales

La pizza de vegetales se ha convertido en una opción popular para quienes buscan mantener una dieta saludable sin renunciar al placer de disfrutar una deliciosa pizza. Esta variación no solo aporta una explosión de sabores naturales, sino que también está llena de nutrientes que benefician nuestra salud.

Una alimentación rica en vegetales es esencial para el bienestar. Los vegetales son una fuente inagotable de vitaminas, minerales y antioxidantes que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y proteger nuestras células del daño oxidativo. Incorporar más vegetales en tu dieta:

Aumenta la ingesta de fibra, mejorando la digestión y promoviendo un sistema digestivo saludable.

Proporciona antioxidantes que combaten los radicales libres, ayudando a prevenir enfermedades crónicas.

Contribuye a la hidratación del cuerpo debido a su alto contenido de agua.

Favorece el control de peso al ser bajos en calorías y ricos en nutrientes, lo que aumenta la sensación de saciedad.

Receta de pizza de vegetales

Preparar una pizza de vegetales es sencillo y versátil. Puedes mezclar y combinar tus vegetales favoritos para obtener una pizza que satisfaga tanto al paladar como a tus necesidades nutricionales.

Ingredientes:

  • 1 base de pizza integral
  • 100 ml de salsa de tomate casera
  • 1/2 berenjena, en rodajas finas
  • 1/2 calabacín, cortado en rodajas
  • 1/2 pimiento rojo, en tiras
  • 100 g de champiñones frescos, laminados
  • 150 g de queso mozzarella bajo en grasa
  • Hojas de albahaca fresca para decorar
  • Aceite de oliva, sal y pimienta al gusto

Instrucciones:

  • Precalentar el horno a 200 °C.
  • Extender la salsa de tomate uniformemente sobre la base de pizza.
  • Distribuir las rodajas de berenjena, calabacín, pimiento y champiñones sobre la salsa.
  • Espolvorear con el queso mozzarella y añadir un toque de sal y pimienta al gusto.
  • Hornear durante 15-20 minutos o hasta que los bordes de la pizza estén dorados y el queso derretido.
  • Retirar del horno y decorar con hojas de albahaca fresca antes de servir.

La pizza de vegetales es una manera deliciosa de disfrutar de una comida clásica mientras cuidas de tu salud.

Foto Freepik

Opciones de queso bajo en grasa

Elegir un queso bajo en grasa para una pizza saludable puede marcar la diferencia sin comprometer el sabor. Hay varias alternativas deliciosas y ligeras que no solo reducen el contenido calórico, sino que también aportan un toque especial a tus platos. Aquí se presentan algunos de los quesos más recomendados para quienes buscan cuidarse sin dejar de disfrutar.

Tipos de quesos recomendados

La selección de quesos bajos en grasa no se limita a una opción, hay varios tipos que son ideales para quienes desean mantener un estilo de vida más saludable. Entre estos se destacan:

Mozzarella baja en grasa: un clásico en la cocina saludable, la mozzarella es conocida por su textura suave y su capacidad para derretirse perfectamente sobre una pizza. Optar por la versión baja en grasa te permite disfrutar de su sabor característico sin el exceso de calorías. Una porción de mozzarella baja en grasa puede aportar menos de 200 calorías, dependiendo de la cantidad utilizada.

Queso feta: originario de Grecia, este queso es popular por su sabor salado y ligeramente amargo. Al ser naturalmente más ligero, el feta se convierte en una excelente opción para quienes desean controlar su peso. Contiene nutrientes esenciales como calcio y proteínas, importantes para el mantenimiento óseo y la regeneración muscular.

Requesón: conocido por su bajo contenido en grasa y alto aporte proteico, el requesón es un aliado para aquellos que buscan una dieta equilibrada. Este queso es perfecto para añadir cremosidad a la pizza sin añadir muchas calorías. Además, es rico en vitaminas B, que son esenciales para el metabolismo energético.

Al incorporar estos quesos en tu pizza, no solo se mantiene un equilibrio nutricional, sino que también se enriquece el plato con sabores auténticos y deliciosos. Es sencilla la manera en que una simple elección de queso puede aportar tanto valor nutricional como placer al paladar.

Importancia de los ingredientes frescos

El uso de ingredientes frescos es fundamental para convertir una pizza en una opción más saludable. Vegetales como el brócoli, la espinaca y los champiñones no solo elevan el perfil nutricional al añadir fibra y antioxidantes, sino que también realzan el sabor y la textura del plato.

Más nutrientes: los vegetales frescos aportan vitaminas esenciales y minerales que benefician la salud general.

Menos calorías: comparado con opciones como el pepperoni y embutidos, los vegetales son bajos en calorías.

Variedad de sabores: cada vegetal aporta su sabor único, permitiendo combinaciones deliciosas.

Reducción de carbohidratos y grasas

Los avances en la cocina saludable han permitido la creación de bases de pizza reduciendo el contenido de carbohidratos y grasas. Un enfoque popular es utilizar bases elaboradas con coliflor o harina integral, que mantienen la textura deseada sin el exceso de calorías vacías.

Coliflor o calabacín: se utilizan como sustitutos de la masa tradicional, proporcionando una base rica en fibra.

Harinas alternativas: la harina de almendra o de garbanzos también es empleada para ofrecer versiones sin gluten.

Control del contenido de sodio

Uno de los mayores desafíos con la pizza tradicional es el alto contenido de sodio proveniente de salsas y quesos procesados. Al elegir salsas caseras y quesos bajos en sal, se puede lograr una pizza deliciosa y respetuosa con la salud cardiovascular.

Salsas caseras: permiten controlar la cantidad de sal y azúcar añadidas.

Quesos bajos en sodio: como la mozzarella ligera, reducen significativamente el contenido de sodio sin sacrificar el sabor.

Personalización según necesidades alimenticias

La personalización es clave para hacer de la pizza un plato que se adapte a diversas necesidades alimenticias, desde veganas hasta bajas en carbohidratos. Esto también permite experimentar y descubrir combinaciones únicas que deleitan al paladar.

Opciones veganas: quesos a base de nueces o levadura nutricional sirven como sustitutos sabrosos.

Proteínas alternativas: tofu y tempeh pueden complementar el perfil nutricional sin añadir grasas saturadas.

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Dany Levito

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