8 posiciones del kamasutra poco conocidas y atléticas
¿El kamasutra está en tu radar pero te parecen repetitivas las mismas posturas de siempre? Si buscas salir de lo cotidiano, estas posiciones no solo llevan la conexión a otro nivel, sino que requieren algo de fuerza y flexibilidad. Perfectas para sumar emoción y ejercicio en la intimidad.
El congreso suspendido
Imagínate apoyada contra la pared, mientras tu pareja te sujeta firmemente por las caderas. Esta posición no solo intensifica la conexión visual, también fomenta una cercanía única entre ambos. Requiere coordinación, fuerza y confianza mutua, ya que mantener el equilibrio es esencial para disfrutarla plenamente. Además de la emoción que genera, puede ser un excelente ejercicio al fortalecer tanto las piernas como los brazos. Si buscan algo dinámico y desafiante, esta opción podría ser perfecta.
El jeté trasero
En esta posición, la mujer toma un rol activo al sostenerse sobre una superficie estable como una mesa o encimera. Desde ahí, retrocede su pelvis mientras su pareja la sostiene firmemente por detrás. Su diseño es ideal para experimentar diferentes ritmos y sensaciones, creando una conexión física más profunda. Es una opción versátil que combina intimidad con movimiento, permitiendo ajustar la intensidad según lo que ambos deseen en el momento.
La escalada del deseo
¿Qué tal sentirte como en una escena de película? Tu pareja te sujeta bajo las caderas mientras tú te apoyas sobre un mueble cercano con los pies. Esta dinámica añade un toque juguetón y mucho contacto cercano. Sin embargo, requiere fuerza abdominal y algo de equilibrio. Es, sin duda, una forma creativa de cambiar los escenarios tradicionales.
Los cimientos invertidos
En esta posición, el hombre se arrodilla mientras la mujer invierte su cuerpo parcialmente, apoyando su peso en los hombros. Él guía los movimientos para lograr penetraciones profundas. Las sensaciones son intensas, pero también es un reto para quienes no tienen mucha flexibilidad. Es clave tomarse el tiempo necesario para encontrar comodidad y ritmo.
La bicicleta en los cielos
Si alguna vez has visto acrobacias aéreas, esta postura seguro te hará pensarlas. Tu pareja te sostiene inclinado hacia atrás, simulando una postura de bicicleta en el aire. Aunque puede parecer atrevido, abre la oportunidad de descubrir contacto físico desde ángulos completamente diferentes, lo que añade intensidad a cada movimiento y sensación. La conexión visual en esta posición también juega un papel importante, creando un momento único de cercanía y confianza.
El poirier acrobático
En esta posición, la mujer se sostiene en un apoyo invertido, similar a una parada de manos, mientras el hombre la sostiene firmemente desde la base. Es una postura que exige equilibrio, concentración y fuerza física de ambos. El ángulo único intensifica las sensaciones, creando una experiencia más profunda y dinámica. Sin embargo, no es adecuada para quienes no tienen experiencia o preparación física suficiente, ya que puede ser difícil mantener la estabilidad sin práctica.
El puente sostenido
En esta postura, la mujer forma un arco similar a un puente con su cuerpo, apoyándose parcialmente mientras el hombre la sujeta por la cadera. Es una posición que combina fuerza y flexibilidad, aportando un elemento emocionante y desafiante. Aquellos con experiencia en ejercicios de estiramiento o yoga pueden encontrarla más accesible, aunque sigue siendo un reto tanto para la coordinación como para la resistencia de ambos. Aporta una conexión intensa y adrenalina por el esfuerzo compartido.
Los codos cruzados
En esta posición, ambos se colocan mutuamente como en un juego de anclas, uno frente al otro, manteniendo un soporte con codos y rodillas. Es comúnmente conocida como una de las más difíciles, pero, si logras encontrar el balance, los resultados pueden ser inolvidables.
Beneficios físicos y emocionales
Además de renovar la chispa en la intimidad, estas posiciones te ayudan a ejercitar músculos que rara vez usamos. Desde los abdominales hasta los glúteos, cada movimiento contribuye a tonificar el cuerpo. Además, añade un componente emocional: la confianza y coordinación necesarias refuerzan el vínculo de pareja.
¿Qué necesitas antes de intentar estas posiciones?
Es fundamental prepararse físicamente con estiramientos básicos y comunicar claramente tus límites con tu pareja. Usar almohadas o apoyos adicionales puede evitar lesiones y mejorar la comodidad durante la práctica. Y no olvides que la seguridad y el consenso siempre tienen prioridad.