A una madre le “roban” su crucero de vacaciones de 15.000 dólares, después de compartir “accidentalmente” su número de reserva en Facebook
Las vacaciones soñadas de una familia estadounidense se convirtieron en una pesadilla cuando la madre compartió accidentalmente su número de reserva de crucero en Facebook, lo que permitió que un desconocido cancelara la reserva y les robara sus vacaciones de $15,000 dólares. Este incidente dramático destaca la importancia de proteger la información personal en línea y los riesgos que conllevan las publicaciones descuidadas en las redes sociales.
El sueño de unas vacaciones familiares en crucero
Tiffany Banks, una enfermera del estado de Kentucky, Estados Unidos, había planeado con gran ilusión unas vacaciones en crucero para ella, su esposo y sus cuatro hijos. Reservaron una suite presidencial en un barco de Carnival Cruise Line con salida desde Florida, con un costo total de alrededor de $15,000 dólares, incluyendo los vuelos y excursiones.
La familia estaba emocionada por disfrutar de este lujoso viaje, que se perfilaba como unas vacaciones de ensueño. Tiffany había hecho todos los preparativos con esmero, asegurándose de que todo estuviera listo para que pudieran relajarse y disfrutar plenamente de sus merecidas vacaciones.
El número de reserva compartido por accidente
Dos días antes de la fecha de salida, Tiffany recibió un correo electrónico de Carnival Cruise informándole que su reserva había sido cancelada. Esto la sumió en un estado de «verdadera pánico» y profunda tristeza, pues ella y sus cuatro hijos rompieron en llanto al recibir esta noticia.
Tiffany aseguró que nunca había solicitado la cancelación de este viaje y sospechaba que podría tratarse de un problema informático. Sin embargo, la compañía de cruceros le informó que la suite que habían reservado originalmente había sido ocupada por otro cliente.
La revelación accidental del número de reserva
Tras investigar el asunto, Carnival Cruise reveló que el problema se debía a que, unas semanas antes de la fecha del crucero, Tiffany había publicado accidentalmente una captura de pantalla de un correo electrónico que contenía el número de reserva de la familia.
Según la compañía, el mismo día de esta revelación accidental, alguien había creado una cuenta en el sitio web de Carnival y había agregado ese número de reserva a su perfil. Luego, 48 horas antes de la fecha del crucero, esta persona había cancelado por completo la reserva de la familia Banks.
La ubicación del fraude y la negativa de la compañía
Carnival Cruise informó que la dirección IP (ubicación geográfica) desde la que se realizó la cancelación fraudulenta se encontraba en Columbia Británica, Canadá. Sin embargo, la compañía no pudo revelar la identidad del estafador.
Ante esta situación, la familia Banks se presentó en el puerto de Florida con la esperanza de poder abordar el crucero de último momento, pero les fue negado el acceso y el barco partió sin ellos. Devastados, tuvieron que improvisar unas vacaciones de última hora en un alojamiento de Airbnb.
La oferta de compensación de Carnival Cruise
Posteriormente, Carnival Cruise ofreció a la familia Banks un bono de $10,404 dólares para una futura reserva, con la condición de que Tiffany publicara algo «favorable a la imagen de Carnival Cruise» en sus redes sociales, resolviendo así el problema.
Sin embargo, Tiffany rechazó esta oferta, argumentando que la compañía no debería haber permitido una cancelación tan sencilla sin un proceso de verificación adecuado. Ella concluyó: «Nunca volveremos a navegar con Carnival».
El impacto emocional y económico
La familia Banks sufrió un impacto emocional y económico significativo. Habían invertido casi $15,000 dólares en este viaje, incluyendo $12,000 o $13,000 dólares solo en la suite, además de varios miles de dólares en excursiones y cerca de $2,000 dólares en vuelos.
Perder este viaje tan costoso y planificado con tanto esmero fue devastador para la familia. Tiffany describió la «verdadera pánica» y la tristeza que los embargó al recibir la noticia de la cancelación, y ella y sus hijos rompieron en llanto.
Las lecciones aprendidas
Este incidente sirve como un recordatorio de la importancia de proteger la información personal en línea y ser cauteloso con las publicaciones en las redes sociales. Compartir detalles sensibles, como números de reserva, puede abrir la puerta a fraudes y robos, como le sucedió a la familia Banks.
Además, este caso pone de manifiesto la necesidad de que las compañías implementen procesos de verificación más sólidos para evitar que terceros puedan cancelar reservas fácilmente. La falta de medidas de seguridad por parte de Carnival Cruise empeoró la situación para la familia.