Descubre ocho alimentos que los nutricionistas jamás recomiendan
Desde hace años los expertos en nutrición han sido claros al asegurar que hay varios alimentos que deberían ser eliminados de nuestra dieta regular
Barras de cereal
A simple vista puede parecer un alimento beneficioso e inofensivo, pero lo cierto es que para los nutricionistas las barras de cereal que encontramos en los supermercados son una verdadera bomba de azúcar y calorías. Los expertos recomiendan evitar su consumo y optar por preparar nuestras propias barras de cereal en casa con auténticos granos enteros, frutas y nueces.
Cereales azucarados
Los nutricionistas se la llevan muy mal con este tipo de productos, ya que son solo mentiras, de hecho, tienen poco de cereal y mucho de azúcar. En concreto, se trata solo de harina blanca mezclada con colorante y recubierta de azúcar; un ataque letal contra la buena salud.
Ensaladas listas para comer
Los bacteriólogos advierten que este tipo de presentaciones son de las más peligrosas que se pueden encontrar en los supermercados. De hecho, pese a que en el empaque se lea que viene «listo para comer», en el alimento puede haber varios tipos de bacterias dañinas que pueden causar problemas intestinales, y estas bacterias no se pueden erradicar completamente porque la ensalada no se procesa térmicamente. Por lo tanto, la mejor opción es lavar a fondo el contenido de la ensalada antes de consumir.
Salchichas
La Organización Mundial de la Salud (OMS) desde hace tiempo ha confirmado que las salchichas, el tocino y otros productos cárnicos aumentan la probabilidad de desarrollar algunos tipos de cáncer. Los nitritos que se encuentran dentro de este tipo de alimentos se transforman en nitrosaminas, potentes agentes carcinógenos al estar en los intestinos. Además, la carne ahumada también puede contener benzopireno, otro carcinógeno.
Patatas fritas de bolsa
Los productos con alto contenido de sal deberían de consumirse solo ocasionalmente. Las patatas fritas de bolsa son alimentos poco nutritivos, con demasiados aditivos y una alta concentración de calorías. Te recomendamos mucho más las opciones caseras, y todavía mejor si son horneadas, ya que tienen menos grasa, además de que la preparación también es más saludable.
Alcohol
Un estudio presentado de 2010 ha demostrado que el alcohol, además de todos sus ya conocidos efectos negativos, también acorta los telómeros en los individuos que lo consumen con frecuencia. Las bebidas alcohólicas son muy energéticas y a mayor sea su graduación, más azúcar contendrá. Por lo tanto, es mejor optar por las opciones que contengan la menor graduación posible, como el vino, la cerveza o un vaso de sidra y, sobre todo, evitar el exceso.
Pan blanco
El pan blanco y otros productos de panadería pueden causar algunos efectos secundarios no deseados en el organismo de los consumidores regulares. Estos alimentos se elaboran con harinas refinadas y grasas saturadas, las cuales llegan a afectar tanto el peso como la salud. De hecho, durante el proceso de refinamiento estas preparaciones pierden gran parte de la fibra dietética, nutriente que participa en la digestión, por lo que su asimilación eleva los niveles de glucosa presentes en la sangre, provocando más sensación de hambre en poco tiempo.
Miel procesada
Antes de comprar miel, revisa bien las etiquetas y déjala en el estante si es del tipo procesada. De hecho, las presentaciones refinadas se encuentran entre los edulcorantes más contaminantes de todos los tiempos. El tipo de pasteurización utilizado en este producto elimina las propiedades saludables, convirtiéndola simplemente en otra presentación del azúcar blanco. Algunas mieles incluso se mezclan con jarabe de maíz, el cual tiene un alto contenido de fructosa, aditivos y otros aromatizantes.