Embarazada sin saberlo, viaja a Turquía para colocarse una banda gástrica
Cuando Shauna Samuel, una británica de 28 años y madre de dos hijos, decidió someterse a una cirugía de manga gástrica en Turquía, nunca imaginó que su viaje terminaría en una pesadilla. Desafortunadamente, no sabía que estaba embarazada en ese momento, lo que desencadenó una serie de eventos trágicos que cambiarían su vida para siempre.
El viaje a Turquía y la cirugía
Convencida de que la cirugía de manga gástrica era la solución a sus problemas de peso, Shauna emprendió el viaje a la ciudad de Izmir, en Turquía, para someterse al procedimiento. Sin embargo, a pesar de los análisis de sangre y la ecografía preoperatoria, los médicos turcos no lograron detectar que Shauna estaba embarazada de aproximadamente 5 semanas.
Después de la cirugía, Shauna comenzó a sentirse cada vez peor y a vomitar constantemente. Cuando regresó al Reino Unido, fue hospitalizada de urgencia debido a una grave deshidratación. Fue entonces cuando los médicos británicos realizaron más pruebas y descubrieron que Shauna estaba embarazada de gemelos, con uno de los bebés ya fallecido.
Según los cálculos, Shauna había perdido a uno de los bebés a las 13 semanas de embarazo, lo que significa que estaba embarazada de 5 semanas cuando se sometió a la cirugía bariátrica en Turquía. La joven madre se encuentra devastada por esta trágica pérdida, que podría haber sido evitada si los médicos turcos hubieran detectado el embarazo.
La falta de comunicación y responsabilidad
Shauna intentó comunicarse con el hospital turco en múltiples ocasiones para obtener respuestas y explicaciones, pero sus esfuerzos fueron infructuosos. Finalmente, logró obtener su historial médico, donde se evidenciaba que los análisis previos a la cirugía habían detectado niveles de hormonas de embarazo, lo que indicaba que Shauna estaba embarazada.
Ahora, se enfrenta a un embarazo complicado, ya que la cirugía de manga gástrica podría afectar negativamente la salud del bebé que logró sobrevivir. Además, la joven madre debe adaptarse a vivir con un manguito gástrico, lo que dificulta que pueda consumir la cantidad de alimentos necesarios para su propio bienestar y el del bebé.
La búsqueda de justicia
Shauna ha intentado obtener ayuda legal en el Reino Unido, pero los abogados se han negado a aceptar su caso debido a la controversia que rodea a la cirugía bariátrica realizada en Turquía. Mientras tanto, sigue a la espera de recibir disculpas y explicaciones por parte del hospital turco responsable de esta situación.
La pérdida de uno de los bebés y las complicaciones derivadas de la cirugía han dejado a Shauna profundamente afectada emocionalmente. Lidiar con la culpa, el dolor y la incertidumbre sobre el futuro de su embarazo han sido una carga abrumadora para esta joven madre.