Este es el detalle que puede salvar matrimonios en crisis
Las relaciones de pareja a menudo enfrentan momentos difíciles, llenos de discusiones y acusaciones que pueden poner en riesgo la estabilidad de la unión. Uno de los casos más comunes es el de los matrimonios que atraviesan crisis por sospechas de infidelidad. Ante estas situaciones, algunas parejas han recurrido a una solución poco convencional: el sexo a tres. Según el sociólogo Ryan Scoats, esta práctica puede ser una estrategia para intentar salvar el vínculo.
Más allá del sexo a tres, los expertos también señalan que la comunicación abierta y la satisfacción sexual son elementos clave para mantener una relación saludable, ya sea en un contexto monógamo o de pareja abierta. Además, la práctica del yoga ha demostrado tener beneficios tangibles para mejorar la vida íntima de las parejas.
El sexo a tres como alternativa para salvar un matrimonio
El sociólogo Ryan Scoats, en su libro sobre relaciones sexuales, presenta los resultados de una investigación realizada con 50 personas que decidieron experimentar el sexo a tres. Según Scoats, esta práctica puede ser una opción para intentar salvar un matrimonio que atraviesa problemas, especialmente aquellos relacionados con sospechas de infidelidad.
Testimonios reales de parejas que recurrieron al sexo a tres
En uno de los casos analizados por Scoats, una mujer casada y su pareja decidieron tener sexo a tres como una especie de «ajuste de cuentas» por los problemas que venían enfrentando. La mujer mencionó que esta decisión se tomó con la intención de intentar salvar su relación.
Consideraciones importantes
Antes de embarcarse en una aventura de sexo a tres, Scoats y la revista Cosmopolitan recomiendan tener en cuenta algunos aspectos clave:
Comunicación abierta: es fundamental hablar con la pareja sobre la posibilidad de involucrar a un tercero y discutir todos los detalles, evitando hacerlo en medio de un momento íntimo.
Protección esencial: utilizar métodos anticonceptivos y protección contra enfermedades de transmisión sexual es indispensable, incluso si se conoce el historial sexual del tercero.
Planificación detallada: es necesario planificar todo lo relacionado con el acto sexual a tres, desde lo que sucederá durante el encuentro hasta si el tercero se quedará a dormir o si será solo una noche.
Establecer límites: antes de la experiencia, se deben dejar claros los límites de lo que cada uno está dispuesto a hacer, respetando los deseos y comodidad de todos los involucrados.
Relaciones abiertas: una alternativa cada vez más aceptada
Además del sexo a tres, los investigadores de la Universidad de Rochester en Estados Unidos han estudiado otra opción para mantener una relación satisfactoria: las relaciones abiertas.
Comunicación y acuerdos claros, claves para el éxito
Según el estudio, las parejas en relaciones abiertas pueden ser tan felices como las parejas monógamas, siempre y cuando mantengan una comunicación saludable y tengan acuerdos claros sobre la posibilidad de involucrarse sexualmente con otras personas.
Diferencias clave entre parejas monógamas y abiertas
Una diferencia importante encontrada en la investigación es que, si bien las parejas monógamas suelen tener menor satisfacción sexual, las personas en relaciones abiertas presentan niveles más elevados de satisfacción en este ámbito.
Perfil de los participantes del estudio
El estudio analizó las respuestas de 1,658 cuestionarios en línea sobre el comportamiento amoroso de individuos entre 20 y 30 años de edad. La mayoría de los participantes eran caucásicos y se identificaban como mujeres, y se encontraban en relaciones de larga duración, con una media de cuatro años.
Yoga: un aliado para mejorar la vida sexual
Más allá de las opciones relacionadas con la apertura de la pareja, la práctica del yoga también ha demostrado tener beneficios significativos para la vida sexual de las parejas.
¿Cómo el yoga impacta positivamente la sexualidad?
Según estudios, el yoga ayuda a disminuir problemas como la frigidez, la eyaculación precoz y la falta de lubricación, contribuyendo al aumento del deseo sexual. Además, fortalece la musculatura pélvica, reduce dolores y molestias, y mejora la irrigación sanguínea, lo que influye positivamente en la producción hormonal y, por ende, en la libido.
Resultados de un estudio sobre los efectos del yoga
Un estudio realizado en hombres y mujeres concluyó que 12 semanas de práctica de yoga mejoraron significativamente el apetito sexual, el deseo, la satisfacción, el orgasmo y, principalmente, la confianza en sí mismos y en la pareja.