Ex bailarina ruso-estadounidense condenada a 12 años de prisión por donar 52 dólares a una fundación ucraniana
Una historia sorprendente ha sacudido el mundo, donde una ex bailarina con doble nacionalidad rusa y estadounidense se enfrenta a una condena de 12 años de prisión por un aparente delito de «traición». El motivo: haber donado 52 dólares a una organización humanitaria que brinda ayuda a Ucrania. Este caso ha generado indignación y debate a nivel internacional, cuestionando los límites de la justicia en tiempos de conflicto.
La acusación de traición por una donación de 52 dólares
Ksenia Khavana, de 33 años, fue arrestada en febrero de 2023 mientras visitaba a su familia en Rusia. Las autoridades rusas la acusaron de traición por haber donado 52 dólares a «Razom for Ukraine», una organización sin fines de lucro con sede en Estados Unidos que proporciona ayuda humanitaria a la población ucraniana.
Según los servicios de seguridad rusa (FSB), este dinero habría sido utilizado para adquirir suministros médicos tácticos, equipos, armas y municiones destinados a las fuerzas armadas ucranianas. Por lo tanto, las autoridades rusas consideraron esta donación como un acto de financiación al «Estado enemigo».
La doble nacionalidad y el contexto de guerra
Ksenia Khavana, también conocida por su apellido de soltera Ksenia Karelina, es una ciudadana estadounidense que reside en Los Ángeles y trabaja en un spa de Beverly Hills. Obtuvo la nacionalidad estadounidense después de casarse en Estados Unidos.
Su arresto se produjo en medio del conflicto entre Rusia y Ucrania, en un momento en que las tensiones geopolíticas se han intensificado. El hecho de que una ciudadana estadounidense haya sido acusada de traición por una donación de 52 dólares ha generado una gran controversia y preocupación a nivel internacional.
El juicio y la condena de 12 años de prisión
El juicio de Ksenia Khavana se llevó a cabo en Ekaterimburgo, una ciudad en las montañas de los Urales, ante el mismo tribunal y juez que condenaron al periodista del Wall Street Journal, Evan Gershkovich, por espionaje en 2023.
Durante el proceso, Khavana admitió su culpabilidad «en parte», reconociendo haber realizado la donación, pero mantuvo que no tenía la intención de que ese dinero fuera utilizado para «acciones anti-rusas». Sin embargo, finalmente fue condenada a 12 años de prisión por el delito de traición.
El esposo de Ksenia Khavana, Chris Van Heerden, ha sido vocal en su defensa. En declaraciones a CBS Mornings, calificó el proceso judicial como «una farsa» y afirmó que su esposa, una ciudadana estadounidense, simplemente ejerció su derecho de la Primera Enmienda al realizar una donación humanitaria.
Van Heerden también reveló que en febrero, cuando Khavana viajó a Rusia para visitar a su familia, él estaba preocupado por su seguridad debido a la guerra en Ucrania, pero ella le aseguró que, al ser rusa, no tendría problemas. Lamentablemente, este «regalo de cumpleaños» terminó convirtiéndose en una pesadilla.
El papel de «Razom for Ukraine»
La organización «Razom for Ukraine» es una ONG con sede en Estados Unidos que se enfoca en brindar ayuda humanitaria, asistencia en casos de desastres, educación y defensa. La organización ha negado categóricamente proporcionar cualquier tipo de apoyo militar a Ucrania.
Sin embargo, las autoridades rusas han acusado a «Razom for Ukraine» de ser un vehículo para canalizar fondos destinados a las fuerzas armadas ucranianas. Esta acusación ha sido rechazada por la organización, que afirma concentrarse únicamente en labores de asistencia humanitaria.
El llamado a la liberación de Khavana
La sentencia de 12 años de prisión impuesta a Ksenia Khavana ha generado indignación y llamados a la liberación de la exballerina. Organizaciones de derechos humanos, así como figuras políticas y de la sociedad civil, han condenado enérgicamente este veredicto, considerándolo desproporcionado y una clara violación de los derechos fundamentales.
Abogados y defensores de Khavana han anunciado su intención de apelar la decisión, esperando que el caso pueda ser revisado y que la justicia prevalezca. La lucha por la liberación de Ksenia Khavana se ha convertido en un símbolo de la defensa de las libertades individuales y la oposición a la creciente represión en Rusia.
