La AEMET tiene la fecha para la primera gran nevada
La primera gran nevada de la temporada ya está a la vuelta de la esquina. Este evento meteorológico será clave para dar comienzo a un mes marcado por temperaturas que nos recuerdan el poder del invierno.
Con la llegada de diciembre, las bajas temperaturas y los primeros signos del invierno ya se hacen notar. Este año, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha anunciado un cambio drástico en las condiciones meteorológicas y ha fijado la fecha para la primera gran nevada de la temporada. ¿Listos para sacar los abrigos y preparar las cadenas? Aquí te contamos todos los detalles.
¿Cuándo llegará la primera nevada?
Según la AEMET, el próximo sábado, 7 de diciembre, será el inicio de un fenómeno meteorológico que atraerá una masa de aire ártico al norte de la península. Esto provocará un fuerte descenso en las temperaturas y, lo más importante, dará paso a nevadas significativas en varias regiones, especialmente en zonas de montaña y áreas situadas a cotas relativamente bajas.
El domingo 8 de diciembre, día de la Inmaculada, marcará el punto álgido de este evento, con la cota de nieve descendiendo a altitudes de entre 600 y 800 metros en el norte del país y niveles más altos en el resto de la península.
¿Qué regiones se verán afectadas?
Norte peninsular: los principales afectados
Las comunidades del norte de España, incluidas Navarra, Aragón y Castilla y León, serán las primeras en recibir la nieve. Por ejemplo, localidades como Benasque podrían registrar temperaturas de hasta -6 grados, según reportes de la AEMET. También se esperan nevadas abundantes en el Pirineo y la Cordillera Cantábrica.
Zonas urbanas: ¿Llegará la nieve?
Aunque las grandes ciudades como Madrid y Barcelona no están en la zona principal de impacto, no se descartan copos en áreas cercanas si las temperaturas nocturnas bajan drásticamente. Burgos, por otro lado, ya prevé la posibilidad de nieve debido a la caída de la cota en esta región.
Sistema Central y áreas del sur
Regiones como el Sistema Central y, en menor medida, el Sistema Ibérico, también podrían experimentar nevadas ligeras, aunque las previsiones iniciales sugieren que el impacto aquí será más moderado.
¿Por qué este cambio repentino?
La llegada de este frío no es casualidad. Este fenómeno se debe a una intrusión de aire polar marítimo. Este tipo de masas de aire se caracterizan por su alta humedad y bajas temperaturas, lo que favorece la formación de nieve cuando chocan con el terreno montañoso de la península.
Además, las condiciones anticiclónicas previas crearon un efecto acumulativo de frío en los valles y zonas bajas. Este cambio brusco llega como un recordatorio de que el invierno no perdona y puede presentarse con toda su crudeza en cuestión de días.
¿Qué podemos esperar después?
La AEMET no descarta que este evento marque el inicio de un patrón meteorológico más invernal. Si bien las temperaturas podrían estabilizarse tras este episodio, el mes de diciembre siempre trae sorpresas. Las olas de frío se vuelven más comunes conforme avanzamos hacia enero, por lo que esta nevada inicial podría ser solo un preludio de un invierno más intenso que años anteriores.
Consejos para estar preparados
Con esta información en mente, aquí tienes algunos consejos para estar listos ante la llegada de la nieve:
Asegúrate de tener cadenas y líquido anticongelante si planeas viajar a zonas afectadas. Las bajas temperaturas pueden ser peligrosas, especialmente en las primeras horas del día. La AEMET proporciona reportes diarios que te mantendrán informado. Si no es imprescindible, es mejor no transitar por carreteras en alerta por nieve.
