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Estilo de vida

Las cuatro formas más sorprendentes de quedar embarazada

Cuando se trata de la concepción, la mayoría de las personas tienen una idea bastante clara del proceso: el esperma nada a través de la vagina y fertiliza un óvulo durante la ventana fértil del ciclo menstrual. Sin embargo, como se demuestra a continuación, este no es el único camino hacia el embarazo. Existen formas de quedar embarazada que parecen casi imposibles, pero que tienen fundamento científico. Desde los llamados «embarazos por salpicadura» hasta la rara condición de la superfetación, este artículo explorará algunas de las maneras más sorprendentes en que las personas pueden concebir.

1. Embarazos por salpicadura

Los «embarazos por salpicadura» son una forma de concepción sumamente poco común que ocurre cuando el semen salpica los genitales externos y logra encontrar su camino hacia la vagina. Para que esto suceda, el esperma tendría que sobrevivir fuera del cuerpo y nadar hacia el óvulo, lo cual es extremadamente difícil.

Según el experto en anatomía clínica Adam Taylor, el esperma no sobrevive más de media hora fuera del cuerpo. Incluso en las condiciones ideales dentro de la vagina, solo 200-300 de los cientos de millones de espermatozoides eyaculados lograrán llegar al óvulo. Por lo tanto, las probabilidades de que el esperma salpicado en la piel externa pueda fecundar un óvulo son mínimas.

Además, el agua, como en las bañeras o jacuzzis, tiende a dispersar el esperma, mientras que el cloro lo mata. Por lo tanto, no es posible quedar embarazada por el esperma presente en el agua.

2. Embarazo por sexo oral

Si bien la posibilidad de quedar embarazada a través del sexo oral es prácticamente nula, existe un caso médico reportado que demuestra la tenacidad del esperma para llegar al óvulo.

El caso, publicado en 1988, describe a una mujer que nació sin vagina y que acudió al médico quejándose de dolores abdominales intermitentes que parecían contracciones. Los médicos descubrieron que en realidad se trataba de dolores de parto, y le practicaron una cesárea. Dado que la mujer no tenía vagina, se descartó el coito como método de concepción. Sin embargo, 278 días antes, la mujer había sido admitida en el hospital por heridas de puñalada en el estómago, resultado de una pelea entre ella, su ex celoso y su nueva pareja. Durante esta pelea, la mujer había practicado sexo oral a su nueva pareja.

Los médicos concluyeron que, durante la cirugía para reparar las heridas de la mujer, el esperma que aún quedaba en su cavidad abdominal pudo haber sido «lavado» y haber migrado hacia el óvulo, permitiendo la fecundación. Esto es posible porque la cavidad peritoneal, donde se mueven los órganos internos, contiene un fluido que puede mantener con vida al esperma y permitirle viajar hasta el óvulo.

Foto Freepik

3. Embarazo por sexo anal

Generalmente se asume que el sexo anal evita el embarazo, y en la mayoría de los casos esto es cierto. Sin embargo, en personas con una malformación reproductiva llamada malformación cloacal, que afecta a 1 de cada 50.000 niñas, sí puede ocurrir un embarazo por esta vía.

En los seres humanos, los tejidos normalmente dividen el cloaca (el «agujero común» para la orina, la defecación y la reproducción) en dos o tres aberturas, dependiendo del sexo. Pero en raros casos, este tejido no logra separar completamente el recto de la cavidad vaginal. Cuando esto ocurre, el esperma puede atravesar cualquier abertura en la pared divisoria y llegar al óvulo para fecundarlo.

Una vez fecundado, el óvulo se implantará normalmente en el útero, como en cualquier otro embarazo.

4. Superfetación

Cuando una mujer ya está embarazada, normalmente entran en acción mecanismos que previenen que vuelva a quedar embarazada. Sin embargo, en raros casos puede ocurrir un fenómeno llamado superfetación, en el que se produce un segundo embarazo mientras el primero ya está en curso.

Este proceso es tan inusual que los científicos aún no comprenden completamente cómo ocurre. La mayoría de los casos registrados han sido en mujeres que utilizaron técnicas de fecundación in vitro (FIV).

En la superfetación, la mujer puede quedar embarazada con una diferencia de 2 a 4 semanas, lo que a menudo significa que los bebés pueden nacer juntos como gemelos. En la mayoría de los casos, estos embarazos no presentan complicaciones y progresan sin problemas.

5. Embarazos ocultos

Además de las formas sorprendentes de concepción, también existen casos de «embarazos ocultos» en los que la mujer no sabe que está embarazada hasta que está muy avanzado el proceso, incluso hasta el momento del parto.

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Un ejemplo de una joven de 22 años, que dio a luz solo seis minutos después de darse cuenta de que estaba embarazada, cuando despertó con dolores de estómago que pensó que podían ser apendicitis, pero cuando sus aguas se rompieron, se encontró empujando para dar a luz a su bebé. Ella misma se sorprendió de que el embarazo pasara desapercibido hasta ese momento.

En estos casos de embarazos ocultos, las madres a menudo no presentan los síntomas típicos del embarazo, como un vientre abultado, y pueden explicar o negar los pocos síntomas que tienen.

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Veronica Pereira

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