11 cosas que podrían estar matando en silencio tu deseo sexual
El deseo sexual es una parte importante de la vida de muchas personas, y cuando ese deseo disminuye, puede ser frustrante y preocupante. Aunque es normal que el deseo sexual varíe a lo largo del tiempo, existen algunas causas importantes que podrían estar afectando tu libido sin que lo sepas.
Fatiga extrema
¿Alguna vez te has sentido tan cansado que simplemente no tienes energía para tener relaciones sexuales? Pues resulta que la fatiga extrema puede ser una de las razones detrás de tu bajón en el deseo sexual. Un estudio realizado por la Fundación Nacional del Sueño encontró que una de cada cuatro parejas casadas dice estar demasiado cansada al final del día para tener relaciones sexuales. Asimismo, una investigación publicada en The Journal of Sexual Medicine descubrió que la falta de sueño puede tener un efecto negativo en el deseo sexual.
Si quieres revivir la pasión en el dormitorio, es importante que te asegures de descansar lo suficiente. Dedica tiempo a dormir y relajarte para recargar tu energía y aumentar tu deseo sexual.
Estrés
El estrés es algo que todos enfrentamos en algún momento de nuestras vidas, ya sea por el trabajo, las relaciones personales o cualquier otra situación estresante. Sin embargo, el estrés crónico puede tener un impacto significativo en tu deseo sexual. Cuando estás bajo mucho estrés, tus niveles de cortisol (la hormona del estrés) pueden aumentar, lo cual puede suprimir la producción de testosterona y otras hormonas sexuales, haciendo que el sexo sea menos atractivo para ti.
Si te sientes muy presionado en el trabajo o si tienes conflictos interpersonales, es importante que encuentres formas de manejar el estrés de manera saludable. Puedes probar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o el ejercicio regular para reducir los niveles de estrés y mejorar tu deseo sexual.
Desbalance hormonal
Tanto si eres hombre como mujer, si tus niveles de testosterona son naturalmente bajos, es posible que siempre hayas tenido un bajo deseo sexual. Si sospechas que tus hormonas están desequilibradas, puedes consultar con tu médico para que te hagan un análisis hormonal y determinar si esta es la causa de tu baja libido.
Además, si tomas anticonceptivos orales, cambiar de píldora o dejar de tomarla puede afectar tus hormonas y, en consecuencia, tu deseo sexual. Si has notado un cambio repentino en tu libido después de cambiar de anticonceptivo, habla con tu médico para ver si hay otras opciones de anticoncepción que podrían funcionar mejor para ti.
Depresión
Cuando tienes problemas de salud mental, como la depresión, es posible que no tengas ganas de hacer nada, mucho menos tener relaciones sexuales. Si has experimentado síntomas de depresión u otra enfermedad mental, esto puede estar afectando tu deseo sexual.
Es importante tener en cuenta que algunos antidepresivos también pueden afectar el deseo sexual. Sin embargo, esto no significa que debas dejar de tomar tus medicamentos para recuperar tu libido. Habla con tu médico si estás preocupado acerca de los efectos secundarios de tus medicamentos y juntos pueden buscar una alternativa que sea más adecuada para ti.
Desequilibrio de la tiroides
La tiroides juega un papel crucial en la regulación de muchas funciones corporales, incluido el deseo sexual. Si tienes una enfermedad de la tiroides o niveles anormales de hormonas tiroideas, esto puede afectar significativamente tu libido. Varios estudios han demostrado que la hipotiroidismo puede afectar la producción de hormonas sexuales, lo que lleva a una disminución en el deseo sexual.
Cuando visites a tu médico, asegúrate de pedir que te hagan un análisis de sangre para verificar tus niveles de hormonas tiroideas. Esto te ayudará a identificar si hay un desequilibrio hormonal que podría estar afectando tu deseo sexual.
Falta de ejercicio
La falta de ejercicio puede disminuir tu deseo sexual, ya que puede afectar tus niveles hormonales, en particular las hormonas sexuales como la testosterona y el estrógeno.
Si sientes que tu deseo sexual está bajo, es posible que desees considerar la posibilidad de incorporar más ejercicio en tu rutina diaria. El ejercicio puede ayudar a aumentar la producción de hormonas sexuales y mejorar tu estado de ánimo general, lo que puede tener un efecto positivo en tu libido.
Mala alimentación
La alimentación juega un papel importante en nuestra salud en general, incluido nuestro deseo sexual. Si no estás siguiendo una dieta equilibrada, es posible que tu libido se vea afectada. Alimentos fritos y salados pueden hacerte sentir hinchado/a y poco atractivo/a para el sexo.
Por otro lado, una dieta equilibrada puede aumentar tu deseo sexual y mejorar tu rendimiento en la cama. Algunos alimentos incluso se consideran afrodisíacos y pueden aumentar el deseo sexual. Si necesitas un impulso, considera agregar alimentos como la sandía a tu dieta.
Baja autoestima
Si tienes una baja autoestima o te sientes inseguro/a acerca de tu cuerpo, es posible que no tengas ganas de tener relaciones sexuales. La imagen corporal negativa puede afectar tu vida sexual de manera negativa.
Si te encuentras pensando constantemente pensamientos negativos acerca de ti mismo/a y de tu cuerpo, es importante hablar con tu pareja sobre cómo te sientes. Juntos, pueden encontrar formas de hacer que te sientas más cómodo/a durante el sexo y buscar ayuda profesional si es necesario.
Deshidratación
Beber suficiente agua es esencial para mantener nuestro cuerpo funcionando correctamente, y esto también se aplica a nuestra vida sexual. La deshidratación puede causar dolores de cabeza y sequedad vaginal, lo que puede hacer que el sexo sea incómodo.
Si no te sientes con ganas, trata de beber más agua a lo largo del día y observa si esto mejora tu deseo sexual. Mantenerte hidratado/a puede tener un impacto positivo en tu vida sexual y en tu salud en general.
Medicamentos
Algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios que afectan el deseo sexual, como los antidepresivos, los anticonceptivos orales, los betabloqueantes y los inhibidores de la ECA son solo algunos ejemplos de medicamentos que podrían afectar tu libido.
Si sospechas que tus medicamentos son los culpables de tu baja libido, consulta con tu médico para analizar las opciones disponibles y ayudarte a encontrar una alternativa que no tenga un impacto negativo en tu deseo sexual.
Necesidades sexuales no satisfechas
Si tus necesidades sexuales no se están cumpliendo en tu relación, es comprensible que tu deseo sexual se vea afectado. Es importante comunicarte abierta y honestamente con tu pareja acerca de tus deseos y necesidades sexuales. Juntos, pueden encontrar formas de satisfacerse mutuamente y mejorar su vida sexual.