Los 10 tipos de obsesiones más comunes que debes conocer
Se hace referencia a pensamientos, imágenes o impulsos generados de forma involuntaria que una persona le hace tener ideas constantes y en contra de su voluntad, al punto de que causan malestar a la persona que los experimenta
Descubrir que uno está obsesionado con ciertos pensamientos o comportamientos puede ser una experiencia aterradora. El término obsesiones, pensamientos obsesivos y neurosis obsesiva se refiere a pensamientos, imágenes o impulsos que se generan en la mente de una persona de manera repetitiva y en contra de su voluntad, lo que puede causar una gran incomodidad y malestar. Es importante destacar que no todas las formas de psicopatología dan lugar a pensamientos recurrentes, excepto en el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
Los ejemplos de pensamientos obsesivos son variados. Por ejemplo, alguien que sufre de hipocondría puede obsesionarse con la idea de que tiene una enfermedad grave. Una persona fóbica puede creer que los demás siempre están hablando mal de ella. Y alguien con trastorno de dependencia afectiva puede vivir con miedo constante a ser abandonado o traicionado.
A veces, el término obsesión se usa de manera errónea para referirse a una fijación, que se relaciona con algo placentero, como un hobby o un interés particular, o incluso una persona amada. Sin embargo, estas situaciones no representan un verdadero fenómeno obsesivo, ya que las obsesiones deben ser intrusivas e inoportunas para ser consideradas como tal.
Definición de lo que es una obsesión según el DSM
Hay muchos tipos de obsesiones que una persona puede experimentar, pero algunos de los más comunes incluyen miedo a contaminarse, preocupación por la seguridad, necesidad de simetría y perfección, y miedo a perder el control. El Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM) define una obsesión como un pensamiento o una imagen recurrente y persistente que la mayoría de los individuos definen como intrusivos o no deseados, y que provocan una ansiedad y un malestar marcados.
Las compulsiones son comportamientos repetitivos que una persona se siente obligada a realizar en respuesta a una obsesión o según reglas que deben cumplirse rigurosamente. Las compulsiones tienen como objetivo reducir la ansiedad y el malestar que se generan a partir de la obsesión, aunque no siempre son realistas y, en muchas ocasiones, son excesivas.
En resumen, las obsesiones pueden tomar muchas formas y causar un gran sufrimiento para quienes las experimentan. Es importante buscar ayuda profesional si se siente atrapado en patrones de pensamiento o comportamiento obsesivos.
Según el DSM, las obsesiones y compulsiones causan malestar significativo, requieren mucho tiempo y pueden conducir al deterioro del funcionamiento social y laboral. Ahora examinemos los diez subtipos más comunes de obsesión y sus características:
Los diez subtipos de obsesión más comunes
- Obsesiones homosexuales: fantasías e impulsos de contenido homoerótico que crean dudas en los sujetos heterosexuales acerca de su sexualidad.
- Obsesión por la contaminación: pensamientos o imágenes relacionados con la duda de haber entrado en contacto con sustancias peligrosas o repugnantes.
- Obsesiones escamánticas: pensamientos o imágenes relacionados con eventos negativos que podrían ocurrir en el futuro si no se siguen ciertas normas de comportamiento o medidas para evitar el resultado negativo.
- Obsesiones somáticas: preocupación excesiva por una parte del cuerpo o la apariencia, en el caso de la dismorfia.
- Obsesiones sexuales y pedófilas: imágenes, fantasías e impulsos sexuales hacia personas o animales incómodos.
- Obsesiones agresivas: imágenes o impulsos de hacer daño a los seres queridos o a uno mismo.
- Obsesiones relacionales: dudas sobre los sentimientos hacia la pareja y fantasías o impulsos sexuales hacia otras personas.
- Obsesiones religiosas y morales: imágenes y pensamientos blasfemos, fantasías sexualizadas hacia imágenes sagradas o insultos a los muertos.
- Obsesión por lesiones propias o ajenas: pensamientos e imágenes relacionados con posibles daños a uno mismo o a los demás.
- Obsesión por el orden y la simetría: necesidad de simetría, uniformidad, equilibrio y exactitud.
Es importante destacar que existen diferentes niveles de gravedad en los trastornos obsesivos, pero la buena noticia es que estos trastornos pueden tratarse y superarse con éxito a través de psicoterapia personalizada con un terapeuta.