Masturbación compulsiva: ¿cómo afecta a nuestra salud?
La masturbación compulsiva es un problema psicológico que puede tener un impacto significativo en la vida diaria de quienes lo padecen. A continuación, conoceremos en detalle este fenómeno, sus consecuencias y cómo detectarlo. Además, proporcionaremos información sobre las posibles soluciones y la importancia de buscar ayuda profesional.
¿Qué es la masturbación compulsiva?
La masturbación es un comportamiento sexual natural y saludable, tanto si se tiene pareja como si no. Muchas personas disfrutan de la masturbación de forma frecuente y no experimentan ningún problema. Sin embargo, cuando la necesidad se vuelve incontrolable y afecta el día a día de la persona, se puede considerar como masturbación compulsiva.
La masturbación compulsiva se caracteriza por una necesidad obsesiva de masturbarse, que puede interferir en la vida cotidiana, generar sentimientos de culpa y ser utilizada como un mecanismo de escape para aliviar otros malestares emocionales. Este problema afecta más a los hombres que a las mujeres y a menudo está relacionado con otros trastornos psicológicos, como la ansiedad, la depresión, el TDAH o la adicción a sustancias.
Consecuencias de la masturbación compulsiva
Dificultad para establecer relaciones amorosas
Las personas que sufren de masturbación compulsiva suelen preferir satisfacer sus deseos sexuales por sí mismos en lugar de tener relaciones sexuales con otra persona. Su principal objetivo es alcanzar el orgasmo, y su mente se concentra en satisfacer esta necesidad en el momento que lo deseen.
Esta conducta dificulta la capacidad de establecer relaciones estables y satisfacer a una pareja. Como resultado, estas personas suelen ser emocionalmente inestables y experimentar sentimientos de culpa. Detrás de la compulsión por masturbarse, existe una persona con muchas inseguridades, por lo que la ayuda de un profesional es esencial para superar este problema.
Aislamiento social
En los casos más graves, las personas con masturbación compulsiva tienden a evitar los eventos sociales y se alejan de sus amigos y conocidos. Buscan el aislamiento para tener más tiempo a solas y poder masturbarse. A veces, encuentran lugares en el trabajo o en la escuela donde pueden esconderse y llevar a cabo este acto. Incluso pueden abrir las cremalleras de sus pantalones para tener un acceso directo a sus genitales en caso de sentir la necesidad.
Lesiones genitales
La masturbación compulsiva puede provocar lesiones en los órganos genitales, especialmente si se realiza de forma excesiva o de manera brusca. En estos casos, es importante que un médico evalúe cualquier lesión, especialmente si es moderada o grave.
Fatiga y falta de energía
Las personas que sufren de masturbación compulsiva suelen experimentar fatiga constante, lo que puede afectar su rutina diaria. La falta de energía puede llevar a la falta de interés por salir, participar en otras actividades y afrontar las responsabilidades diarias.
Esta falta de energía puede tener diversas consecuencias negativas en la vida de la persona, como dificultades laborales, problemas económicos y conflictos con la familia y amigos cercanos.
Cómo detectar la masturbación compulsiva
No existe una cifra exacta que determine si una persona sufre o no de masturbación compulsiva. Sin embargo, hay algunas señales que pueden indicar la presencia de este problema. Aquí te presentamos algunas claves para evaluar si estás experimentando masturbación compulsiva:
- Intenta pasar varios días sin masturbarte y observa cómo te sientes. Si experimentas síntomas de abstinencia, como nerviosismo, malestar, irritabilidad o inquietud, es recomendable buscar la ayuda de un profesional.
- Observa si has perdido el interés por tener relaciones sexuales con otras personas a medida que aumenta tu tiempo de masturbación. Este puede ser un signo de advertencia de que has perdido el control de tus impulsos.
- Presta atención a si aumenta tu comportamiento masturbatorio con el tiempo. Si sientes la necesidad cada vez mayor de masturbarte, es posible que te hayas acostumbrado a la liberación de oxitocina y otras sustancias químicas en el cerebro que se producen durante el orgasmo, lo que te lleva a buscar cada vez más estimulación.
- Observa si la masturbación compulsiva está afectando negativamente tu vida diaria. Si tus relaciones personales, tu trabajo o tus estudios se ven afectados, es importante buscar ayuda profesional. Además, es posible que la masturbación compulsiva te lleve a enfrentar problemas legales, como masturbarse en lugares públicos, lo que puede resultar en la pérdida del empleo y problemas financieros.
Buscar ayuda profesional
Las personas que sufren de masturbación compulsiva a menudo son reacias a buscar ayuda profesional. Debido a la dificultad para enfrentar los sentimientos de vergüenza y culpa, tienden a esconderse en lugar de pedir ayuda.
El objetivo del tratamiento no es buscar la abstinencia, sino evolucionar hacia una sexualidad más saludable y menos impulsiva. La terapia cognitivo-conductual o la sexoterapia son opciones de tratamiento comunes. En algunos casos, también se puede considerar la intervención farmacológica para reducir los síntomas iniciales, como la ansiedad o la depresión.