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Salud

Menopausia: esta dieta reduce los sofocos en un 95%

La menopausia es una etapa en la vida de las mujeres que puede estar acompañada de diversos síntomas incómodos, como los sofocos que se destacan por ser uno de los más comunes y molestos. Sin embargo, según un estudio publicado en la revista Complementary Therapies in Medicine, adoptar un determinado régimen alimentario puede reducir significativamente la frecuencia e intensidad de estos sofocos durante la menopausia.

Los sofocos: un síntoma común de la menopausia

Durante la menopausia, muchas mujeres experimentan sofocos, cambios de humor, aumento de peso e insomnio, entre otros síntomas. Los sofocos, en particular, son uno de los síntomas más comunes y afectan a aproximadamente el 80% de las mujeres en esta etapa.

Los sofocos pueden ser especialmente problemáticos durante la noche, ya que pueden interrumpir el sueño y causar despertares nocturnos. Además, se ha observado que las mujeres que experimentan sofocos tienen un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, enfermedad de Alzheimer, diabetes y enfermedades cardiovasculares.

¿Existen soluciones para los sofocos durante la menopausia?

Afortunadamente, existen algunas medidas que se pueden tomar para reducir la frecuencia e intensidad de los sofocos durante la menopausia. Algunas de estas medidas incluyen mantener un peso saludable, limitar el consumo de alcohol, café y alimentos picantes, y en algunos casos, utilizar terapia hormonal sustitutiva.

Además, según el estudio mencionado anteriormente, seguir un régimen alimentario vegano y bajo en grasas, que incluya soja, puede disminuir los sofocos en un 95% en mujeres en la etapa de la menopausia.

Foto Freepik

¿Por qué un régimen alimentario vegano puede reducir los sofocos?

Los investigadores se interesaron en estudiar el efecto de un régimen alimentario vegano en los sofocos durante la menopausia debido a que la obesidad es un factor de riesgo para experimentarlos. Según la Dra. Hana Kahleova, directora de investigación clínica del Physicians Committee for Responsible Medicine y autora principal del estudio, se ha observado que un régimen alimentario vegano promueve la pérdida de peso y ayuda a combatir la obesidad. Además, al evitar el consumo de carne y productos lácteos, que son ricos en grasas saturadas e inflamatorias, se reduce la inflamación que puede contribuir a los sofocos.

El microbioma intestinal y los sofocos

Para llegar a estas conclusiones, los investigadores utilizaron los datos de 84 mujeres en la etapa de la menopausia que participaron en el ensayo Women’s Study for the Alleviation of Vasomotor Symptoms Trusted Source (WAVS). Algunas de las participantes siguieron un régimen alimentario vegano bajo en grasas que incluía media taza de soja cocida al día, mientras que las demás continuaron con su alimentación normal durante 12 semanas. Luego, se realizaron análisis de las heces de las participantes y se observaron cambios en el microbioma intestinal de aquellas que siguieron el régimen alimentario vegano. Específicamente, se encontró un aumento de bacterias Porphyromonas y Prevotella corporis en las mujeres que siguieron el régimen vegano, y estas bacterias estaban asociadas con una reducción de los sofocos severos.

Los resultados de este estudio muestran cómo un régimen alimentario vegano puede jugar un papel importante en el manejo de los sofocos y en la prevención de enfermedades relacionadas con la alimentación. Según la Dra. Kahleova, seguir un régimen alimentario vegano puede ayudar a mantener una buena salud a medida que envejecemos.

Adoptar un régimen alimentario vegano y bajo en grasas, que incluya soja, puede ser una estrategia efectiva para reducir la frecuencia e intensidad de los sofocos durante la menopausia. Este enfoque puede contribuir a mejorar la calidad de vida de las mujeres en esta etapa y ayudar a prevenir enfermedades relacionadas con la menopausia. Sin embargo, es importante recordar que cada mujer es única y que siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta.

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Veronica Pereira

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