¿Puede funcionar un matrimonio sin sexo?
Muchas parejas se enfrentan a la disminución de la frecuencia de las relaciones sexuales a lo largo de sus matrimonios. Aunque esto puede parecer una señal de problemas, la realidad es que los matrimonios sin actividad sexual son más comunes de lo que se cree y, de hecho, pueden ser tan felices y satisfactorios como aquellos que mantienen una vida sexual activa.
La «normalidad» de las relaciones sexuales en el matrimonio
Tradicionalmente, se ha considerado que el sexo es un elemento fundamental para juzgar si una relación de pareja es satisfactoria. Sin embargo, esta noción de «normalidad» debe ser cuestionada. Según los expertos, entre el 10% y el 20% de las parejas norteamericanas son completamente asexuales, lo que significa que no tienen relaciones sexuales o tienen menos de 10 al año. Además, muchos otros matrimonios tienen una actividad sexual muy reducida, pero siguen siendo felices y están satisfechos con su relación.
Razones detrás de la disminución del sexo en el matrimonio
Existen varias razones por las que las parejas pueden experimentar una disminución en su vida sexual a lo largo del tiempo. Algunas de ellas son:
Cambios hormonales y fisiológicos
A medida que envejecemos, nuestros niveles hormonales cambian y nuestra capacidad y deseo sexual pueden disminuir de forma natural. Esto es especialmente común en las mujeres después de la menopausia.
Estrés y fatiga
Las demandas de la vida diaria, el trabajo, los hijos y otras responsabilidades pueden agotar la energía y el interés sexual de las parejas.
Problemas de salud
Ciertas condiciones médicas, como problemas cardíacos, diabetes o trastornos del sueño, pueden afectar negativamente a la función sexual.
Falta de intimidad emocional
Cuando la conexión emocional y el compañerismo disminuyen, esto también puede repercutir en la vida sexual de la pareja.
Tres escenarios posibles
Según los expertos, las parejas con poca o nula actividad sexual pueden encontrarse en una de estas tres situaciones:
1. Ambos desean recuperar la pasión sexual
Si tanto usted como su pareja quieren reavivar su vida sexual, es posible lograrlo con la ayuda de un terapeuta de pareja o de un sexólogo. Aunque no será fácil, especialmente después de un largo período de abstinencia, existen técnicas y estrategias que pueden ayudar a recuperar la chispa.
2. Uno de los miembros de la pareja sufre por la falta de sexo
En este caso, es importante que la pareja hable abiertamente sobre el tema y vean si pueden llegar a un acuerdo. Quizás puedan encontrar formas alternativas de intimidad física que satisfagan las necesidades de ambos.
3. Ninguno de los dos tiene problemas con la abstinencia sexual
Algunas parejas simplemente no le dan tanta importancia al sexo y se sienten realizadas y felices sin él. Mientras ambos estén de acuerdo, no hay nada de malo en ello.
Redefiniendo el éxito en el matrimonio
La sociedad a menudo nos hace creer que el sexo es fundamental para una relación de pareja exitosa. Sin embargo, los expertos afirman que el amor y la conexión emocional son mucho más importantes que la actividad sexual. Algunas parejas asexuales o con una vida sexual muy reducida reportan tener matrimonios muy satisfactorios en otros aspectos.
Comunicación abierta y honesta
La clave para manejar una situación de poca o nula actividad sexual en el matrimonio es la comunicación abierta y honesta entre los cónyuges. Deben discutir sus necesidades, preocupaciones y expectativas sin juzgarse mutuamente. Sólo así podrán encontrar soluciones que funcionen para ambos.
Buscar ayuda profesional
Si la falta de sexo está causando problemas o tensión en la relación, no duden en buscar ayuda de un terapeuta de pareja o un sexólogo. Estos profesionales pueden guiarlos para encontrar formas de mejorar la intimidad, ya sea física o emocional.