Las puntas abiertas es el problema más común del cabello dañado. Por lo regular, no aparecen por sí solas, sino que son consecuencias de un cabello quebradizo, excesivamente seco, estresado o desordenado.
Pueden aparecer por tiempos cortos, pero si cuidamos el cabello adecuadamente, el problema también desaparece en poco tiempo.
¿Qué son realmente las puntas abiertas en el cabello?
El nombre científico de este fenómeno es tricoptilosis. Es un deterioro de la estructura y forma del cabello dividiéndose en dos en sus puntas. Aparecen más fácilmente en cabellos largos y se manifiestan menos en cabellos cortos. Tienen numerosas causas, pero se dividen en dos categorías: mecánicas y no mecánicas.
Mecánicas: son las causas más frecuentes que ocasionan este problema. El calor exagerado de los secadores de pelo, el uso de planchas o rizadores son algunos de los principales causantes de este problema, además del uso acostumbrado de decolorantes y tintes.
No mecánicas: si se tiene el cabello sensible, hasta la contaminación por sí sola puede contribuir al deterioro del tallo y luego causar el problema. Asimismo, las excesivas temperaturas, tanto altas como bajas, actúan de manera negativa en el cabello, al igual que el aire acondicionado sin humidificación. A todo esto, se le suma el cloro de las piscinas, el agua del mar o incluso el exceso de viento.
Estas son las recomendaciones para evitar o combatir las puntas abiertas
- Utiliza productos nutritivos de buena calidad como champús, acondicionadores y cremas o tratamientos, especialmente si tienes un cabello sensible y delicado.
- Usa productos que protejan el cabello al cepillarlo o plancharlo, cubriéndolo del exceso de calor. En las piscinas, en el mar o en las montañas, proteja el cabello de la acción del sol y otros agentes atmosféricos.
- Planifica un pequeño corte que elimine la mayor parte de las puntas abiertas, permitiendo que otros tratamientos actúen de manera efectiva.
- No exageres en la coloración o decoloración del cabello, ya que estos productos contienen agentes secantes.
- Incluso la alimentación puede afectar de cierta forma el cabello y, por ende, su debilitamiento. Evita los excesos y trata de mantener una dieta sana y equilibrada.
- Fumar también es un gran enemigo tanto del cabello como de la piel.
