El vino es una bebida ampliamente disfrutada por muchas personas en todo el mundo. La elección entre vino blanco y vino tinto a menudo se reduce a la preferencia personal, pero ¿sabías que uno es más saludable que el otro?
El vino blanco: una opción más saludable
Según Debbie Petitpain, dietista registrada y portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética, el vino blanco seco es considerado el más saludable, especialmente aquellos vinos cultivados en climas más frescos. Cuando el vino se cultiva en climas más fríos, contiene menos azúcar y alcohol. Algunos vinos tienen azúcares naturales que quedan de la fermentación de las uvas, mientras que otros, como los vinos de postre, tienen azúcares añadidos.
El vino no contiene muchos nutrientes aparte de las calorías y el contenido de alcohol. Por lo tanto, consumir vinos que ya tienen bajos niveles de azúcar y alcohol es un buen punto de partida. Según las Pautas Dietéticas para los Estadounidenses del Instituto Nacional de Salud, se recomienda no consumir más de dos bebidas alcohólicas al día para los hombres y no más de una al día para las mujeres. Esto generalmente se traduce en una copa estándar de vino de 5 onzas con un contenido de alcohol del 12% en volumen (ABV). Según Petitpain, los vinos blancos secos suelen tener un ABV entre el 9% y el 11%.
Una forma de hacer tu vino aún más saludable es convertirlo en un vino spritzer, según sugiere Petitpain. «Agregar agua con gas o incluso agua con sabor a gasificada para diluir tu vino puede darte un tamaño de porción más grande sin agregar más alcohol o calorías a tu bebida», explicó.
Beneficios para la salud: ¿es el vino realmente bueno para ti?
La investigación sobre los beneficios para la salud del vino y el consumo de alcohol en general es continua y a veces parece interminable. Un estudio publicado este año reveló que el consumo moderado de alcohol puede llevar a una reducción a largo plazo en la actividad de estrés en el cerebro, lo que finalmente disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas. Los investigadores encontraron que una bebida alcohólica al día para las mujeres y una o dos bebidas al día para los hombres están relacionadas con una reducción en la señalización de estrés en el cerebro.
Sin embargo, los cardiólogos advierten que no se pueden ignorar los peligros asociados con el consumo de alcohol. El mismo estudio también encontró que cualquier cantidad de consumo de alcohol aumenta el riesgo de cáncer, y cantidades más altas, más de 14 bebidas por semana, pueden llevar a un mayor riesgo de ataques cardíacos, así como a una disminución de la actividad cerebral en general.
Disfrutando del vino tinto correctamente
Mientras muchos blancos y rosados están listos para servir de inmediato, las variedades de vino tinto generalmente necesitan espacio para respirar en una decantadora o en tu copa. Pero para aquellos que no tienen tiempo que perder, hay una forma más rápida: con un batidor de leche. El vino debe tener la oportunidad de «respirar» después de destaparlo y antes de dar el primer sorbo, lo que permite que se mezcle con el oxígeno y provoque una reacción química que elimina los compuestos de sulfito y etanol desfavorables.
