Ser padre después de los 60-70 años: ¿cuáles son los riesgos para el niño?
En la actualidad, cada vez es más común que hombres famosos y de edad avanzada, como Roberto Cavalli, Richard Gere, Robert De Niro y Clint Eastwood, se conviertan en padres después de los 60 o 70 años. Sin embargo, mientras que se ha hablado mucho sobre los riesgos asociados con la maternidad tardía, se ha prestado menos atención a los riesgos para el bebé cuando el padre es de edad avanzada.
Ovulación y cambios en los espermatozoides masculinos
Cuando se trata de la edad materna, es ampliamente conocido que las mujeres tienen un número limitado de óvulos, que disminuye a medida que envejecen. Sin embargo, en el caso de los hombres, los espermatozoides se renuevan constantemente a lo largo de su vida, lo que podría sugerir una menor preocupación por los riesgos genéticos asociados con la paternidad tardía. Sin embargo, varios estudios científicos han demostrado que la edad paterna también puede tener un impacto en la salud del bebé.
Mientras que el riesgo de anomalías cromosómicas, como el síndrome de Down, está más asociado con la edad materna, la edad avanzada del padre también se ha relacionado con un mayor riesgo de ciertas enfermedades genéticas. Estas enfermedades, conocidas como patologías monogénicas, son causadas por mutaciones en un solo gen y pueden manifestarse de diversas formas. A medida que los hombres envejecen, existen un aumento en la tasa de mutaciones «espontáneas» en el ADN de los espermatozoides, y algunas de estas mutaciones pueden conferir ventajas de crecimiento a los espermatozoides, lo que aumenta aún más la probabilidad de transmitir mutaciones genéticas a la descendencia.
Los riesgos para el bebé cuando el padre es mayor
Es importante tener en cuenta que el riesgo de enfermedades genéticas asociadas con la edad paterna es generalmente menor que el riesgo de anomalías cromosómicas relacionadas con la edad materna. Sin embargo, es fundamental comprender los posibles riesgos y tomar decisiones informadas sobre la paternidad a una edad avanzada.
Las patologías monogénicas asociadas con la edad paterna pueden variar en gravedad y frecuencia. Algunas de estas enfermedades son más conocidas, como ciertas formas de enanismo o craneosinostosis, mientras que otras son menos comunes. Aunque estas enfermedades suelen ser raras o ultra raras, es importante considerar la posibilidad de que puedan afectar a la descendencia cuando el padre es de edad avanzada.
A los 60-70 años, el nivel de energía suele ser menor que en la juventud, lo que puede hacer que las demandas diarias de cuidado infantil sean más agotadoras. Cuidar de un bebé todos los días puede ser un esfuerzo significativo para los padres mayores. Además, este es un momento en el que se espera disfrutar de actividades personales y de mayor libertad y tener un hijo implica un cambio de vida significativo y puede ser difícil mentalmente renunciar a esta libertad y volver a asumir responsabilidades que se creían superadas.
por otro lado, si estabas planeando la jubilación, puede ser necesario continuar trabajando durante más años para hacer frente a estos gastos extras. Es importante estar preparado financieramente y considerar el impacto económico que tener un hijo puede tener en la planificación financiera personal.
Percepción del riesgo y herramientas de diagnóstico prenatal
Curiosamente, a pesar de los riesgos asociados con la paternidad tardía, a menudo se percibe que solo las mujeres están preocupadas por concebir a una edad avanzada. Esto puede deberse a una mayor conciencia sobre las pruebas de diagnóstico prenatal disponibles para identificar anomalías cromosómicas relacionadas con la edad materna, como la amniocentesis y la villocentesis.
Sin embargo, también existen herramientas de diagnóstico para evaluar los riesgos genéticos asociados con la edad paterna. Estas pruebas, aunque más complicadas que las pruebas disponibles para la edad materna, pueden proporcionar información importante para tomar decisiones informadas sobre la paternidad a una edad avanzada.
Es importante destacar que la consulta genética prenatal es fundamental para comprender los resultados de estas pruebas y evaluar los posibles riesgos. Sin embargo, la consulta genética no siempre se ofrece de manera sistemática, lo que puede contribuir a la falta de percepción del riesgo por parte de los hombres.