Té verde: los 3 mejores momentos del día para beberlo y quemar grasa

El té verde se ha convertido en una de las bebidas más populares en el mundo de la salud y el bienestar. Sus propiedades antioxidantes y beneficios metabólicos lo convierten en un aliado efectivo para quienes buscan mejorar su metabolismo y reducir grasa corporal. Pero, ¿sabías que el momento en que lo bebes puede impactar directamente en sus efectos? Aquí te contamos los tres mejores momentos del día para disfrutar esta potente bebida y favorecer la quema de grasa.
¿Por qué el té verde ayuda a quemar grasa?
El té verde contiene catequinas, un tipo de antioxidante, y moderadas cantidades de cafeína que combinadas estimulan el metabolismo. En particular, la epigalocatequina galato (EGCG) ha demostrado ser eficaz para aumentar el proceso de oxidación de grasas en el cuerpo. Estudios han señalado que el consumo constante de té verde puede aumentar la tasa metabólica hasta en un 4%, y promover un mayor uso de grasa como fuente de energía. Esto lo convierte en un aliado perfecto para quienes buscan perder peso o mantener un estilo de vida saludable.
Sin embargo, para obtener el máximo provecho, es esencial consumirlo en los momentos adecuados. Beber té verde en el momento correcto puede marcar la diferencia entre aprovechar sus beneficios al máximo o experimentar ciertos efectos secundarios.
Por la mañana: un impulso metabólico al comenzar el día
El mejor momento para iniciar tu jornada con una taza de té verde es en ayunas o acompañado de un desayuno ligero. A primera hora del día, el cuerpo está en un estado ideal para absorber los nutrientes, y el té verde puede ofrecer beneficios significativos como activar el metabolismo y aportar energía.
La combinación de cafeína y catequinas no solo ayuda a quemar grasa, sino que mejora la concentración y el estado de alerta. Aunque no contiene tanta cafeína como el café, el té verde ofrece una energía más estable, permitiendo comenzar el día con buen ánimo y sin los picos de ansiedad que a veces provoca el café.
Además, beberlo en ayunas puede contribuir a reducir la retención de líquidos, algo ideal para quienes desean ver resultados visibles pronto. Se sugiere combinarlo con un poco de jugo de limón, ya que la vitamina C potencia la absorción de los antioxidantes y favorece aún más el metabolismo.
Entre comidas: controla el apetito y potencia la quema de grasas
Otro momento clave para beber té verde es entre las comidas principales, preferiblemente unas dos horas después de comer. Consumirlo en este intervalo no solo ayuda a controlar el apetito, sino que puede evitar los antojos, especialmente de alimentos ricos en azúcar o carbohidratos.
En este momento del día, las catequinas trabajan como estimulantes para el metabolismo sin interferir con la digestión de los alimentos. Además, el té verde es un excelente complemento para las dietas bajas en calorías, ya que mantiene al organismo en un estado de quema activa de calorías. Según investigaciones, tomar té verde entre comidas, acompañado de alimentos ricos en vitamina C como cítricos o fresas, optimiza la absorción de hierro y aumenta la efectividad del metabolismo.
Es importante, sin embargo, evitar consumirlo justo después de comer, pues los taninos presentes en el té verde pueden dificultar la absorción de ciertos minerales como el hierro, especialmente si ya se tiene una deficiencia de este.

Antes de ejercitarte: maximiza el rendimiento físico
Tomar una taza de té verde antes del ejercicio puede transformar tu rutina de entrenamiento. Gracias a su combinación de cafeína y antioxidantes, el té verde aumenta la resistencia, mejora la quema de grasas y acelera la recuperación muscular. Se cree que puede aumentar la combustión de grasa durante el ejercicio en hasta un 17%, maximizando así los resultados del entrenamiento.
Además, su capacidad antioxidante puede reducir los niveles de daño muscular y el estrés oxidativo provocado por el ejercicio. Esto no solo optimiza el rendimiento deportivo, sino que también ayuda al cuerpo a recuperarse más rápido después de un esfuerzo físico intenso.
Una buena práctica es beberlo 30 minutos antes del entrenamiento para aprovechar al máximo su contenido de cafeína y su capacidad para movilizar los depósitos de grasa como fuente de energía. Esto es especialmente útil para sesiones de cardio o entrenamiento de alta intensidad.
Evita consumirlo en estos momentos
Aunque el té verde ofrece muchos beneficios, hay momentos que se deben evitar. Beberlo justo antes de dormir puede interferir con el descanso debido a su contenido de cafeína, lo cual puede provocar nerviosismo o dificultad para conciliar el sueño. También es mejor evitarlo durante las comidas principales para prevenir la inhibición en la absorción de minerales esenciales.
Además, consumir más de cinco tazas al día puede traer efectos adversos como molestias gastrointestinales y aumento de nerviosismo, especialmente en personas sensibles a la cafeína.