¿Tienes problemas de libido? Aquí te contamos cómo alcanzar el orgasmo después de la menopausia
La menopausia es una etapa natural en la vida de toda mujer, marcada por cambios físicos, hormonales y emocionales significativos. Uno de los aspectos que más preocupa a muchas mujeres durante esta transición es cómo afectará su vida sexual. La creencia de que la menopausia supone el fin de la actividad íntima está muy extendida, pero nada más lejos de la realidad.
Aunque es cierto que la caída de los niveles de estrógeno y otros cambios fisiológicos pueden generar problemas como sequedad vaginal, falta de lubricación o disminución del deseo, existen múltiples estrategias para mantener una vida sexual plena y satisfactoria después de la menopausia.
Cambios en la sexualidad durante la menopausia
La menopausia trae consigo toda una serie de transformaciones en el cuerpo de la mujer que pueden repercutir en su vida íntima. Algunos de los principales cambios que pueden afectar a la sexualidad incluyen:
Sequedad vaginal: La caída de los niveles de estrógeno puede provocar que la vagina se vuelva más seca, fina y menos elástica, lo que puede hacer que las relaciones sexuales resulten incómodas o dolorosas.
Disminución del deseo sexual: El descenso hormonal también puede reducir el apetito sexual y dificultar la excitación y el logro del orgasmo.
Debilitamiento del suelo pélvico: Los músculos del suelo pélvico se pueden debilitar con la edad, afectando a la sensibilidad y a la capacidad de experimentar orgasmos intensos.
Cambios en la respuesta sexual: La respuesta sexual femenina también puede verse alterada, con una excitación menos intensa y una lubricación más lenta.
Estos cambios son normales y naturales, pero no tienen por qué suponer el fin de tu vida sexual activa. Con los cuidados y las estrategias adecuadas, podrás seguir disfrutando plenamente de tu sexualidad.
¿Cómo afrontar los cambios en la sexualidad?
Ante los retos que plantea la menopausia en el ámbito sexual, es fundamental adoptar un enfoque integral que aborde los aspectos físicos, emocionales y de pareja. Aquí te ofrecemos algunas pautas clave:
Comunicación abierta con tu pareja
Hablar con tu pareja sobre los cambios que estás experimentando es esencial para mantener una conexión íntima y afrontar juntos esta transición. Comparte tus preocupaciones, tus necesidades y tus deseos, y escucha atentamente los suyos. Juntos, podrán explorar nuevas formas de expresar su intimidad y satisfacción sexual.
Cuidado de la salud íntima
Existen diversos tratamientos y productos que pueden ayudarte a hacer frente a problemas como la sequedad vaginal o la disminución de la lubricación. Consulta a tu ginecólogo o ginecóloga para que te recomiende la mejor opción, ya sea a través de terapia hormonal local, lubricantes o hidratantes vaginales.
Fortalecimiento del suelo pélvico
Realizar ejercicios de Kegel de forma regular puede ayudarte a fortalecer los músculos del suelo pélvico, mejorando la sensibilidad y la capacidad de experimentar orgasmos intensos.
Exploración de nuevas formas de intimidad
Aprovecha esta etapa para explorar y experimentar con nuevas formas de expresar tu sexualidad, más allá de la penetración. Prueba diferentes tipos de caricias, juegos previos, posiciones y juguetes sexuales que puedan ayudarte a alcanzar el orgasmo de manera satisfactoria.
Manejo del estrés y el bienestar emocional
El estrés y las emociones negativas pueden tener un impacto significativo en la libido y la capacidad de disfrutar de las relaciones sexuales. Practica técnicas de relajación, como la meditación o el yoga, y dedica tiempo a cuidar de tu bienestar emocional.
Adopción de un estilo de vida saludable
Mantener hábitos saludables, como una alimentación equilibrada, la práctica regular de ejercicio y el descanso adecuado, puede contribuir a mejorar tu salud sexual y tu capacidad de alcanzar el orgasmo.
Estrategias para mejorar el deseo sexual
Si has notado una disminución en tu apetito sexual, existen diversas estrategias que puedes poner en práctica para reavivar tu libido:
Planifica tus encuentros íntimos
Reserva un momento del día o de la semana para dedicarte a tu pareja y a la intimidad. Crea un ambiente relajado y romántico, y tómate el tiempo necesario para estimularte y excitarte mutuamente.
Experimenta con nuevas actividades sexuales
Sal de la rutina y prueba diferentes posiciones, juegos previos o juguetes eróticos que puedan despertar tu interés y tu curiosidad. La novedad y la exploración pueden ser excelentes aliadas para aumentar el deseo.
Practica ejercicios de piso pélvico
Los ejercicios de Kegel no solo fortalecen los músculos del suelo pélvico, sino que también pueden incrementar la sensibilidad y la capacidad de alcanzar el orgasmo.
Utiliza suplementos naturales
Algunas plantas y hierbas, como la maca andina, se han relacionado con un aumento del deseo sexual en las mujeres. Consulta con tu médico antes de probar cualquier suplemento.
Cuida tu bienestar emocional
El estrés, la ansiedad y la depresión pueden tener un efecto negativo en tu libido. Dedica tiempo a actividades que te relajen y te hagan sentir bien, como la meditación, el yoga o la práctica de un hobbie.
Tratamientos para mejorar la función sexual
Si los cambios en tu sexualidad son más pronunciados y no logras mejorarlos con las estrategias anteriores, existen diversos tratamientos que pueden ayudarte:
Terapia hormonal local
La terapia hormonal local, a través de cremas, óvulos o anillos vaginales con estrógenos, puede ayudar a aliviar los síntomas de sequedad y atrofia vaginal, mejorando la lubricación y la comodidad durante las relaciones sexuales.
Medicamentos para aumentar el deseo sexual
En algunos casos, los profesionales de la salud pueden recomendar medicamentos como la flibanserin (Addyi) o la bremelanotida (Vyleesi), que han demostrado ser eficaces para aumentar el deseo sexual en mujeres.
Terapia sexual y de pareja
La terapia sexual y de pareja puede ser de gran ayuda para abordar los aspectos emocionales y de comunicación que puedan estar afectando a tu vida íntima. Un/a terapeuta especializado/a te guiará en el proceso de redescubrir y mejorar tu sexualidad.
Tratamientos complementarios
Algunas terapias complementarias, como la acupuntura o la terapia con vibración, también pueden ser beneficiosas para mejorar la función sexual femenina.
Manteniendo una sexualidad activa después de la menopausia
La menopausia no tiene por qué suponer el fin de tu vida sexual activa. Con los cuidados y las estrategias adecuadas, podrás seguir disfrutando plenamente de tu sexualidad y alcanzando orgasmos satisfactorios. Recuerda que los cambios son normales y naturales, y que con paciencia, comunicación y creatividad, podrás adaptarte a esta nueva etapa de tu vida.
Mantén una actitud abierta y curiosa, y no dudes en buscar ayuda profesional si lo necesitas. Juntas, podemos romper los tabúes y visibilizar que la sexualidad en la menopausia es un tema importante y que merece ser abordado sin vergüenza.