El cáncer de mama es una enfermedad que ha afectado a muchas mujeres en todo el mundo. A lo largo de los años, han surgido diversos mitos y creencias sobre los factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Uno de los mitos más populares es la supuesta relación entre el uso de sostén y el cáncer de mama.
El origen del mito
Durante mucho tiempo, se ha difundido la idea de que el uso de sostén, especialmente aquellos con aros o demasiado apretados, puede obstruir el flujo linfático y aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Esta creencia se popularizó en 1995 con la publicación del libro «Dressed to Kill» de Sydney Ross Singer y Soma Grismaijer. En este libro, se afirmaba que las mujeres que usaban sostén con aros durante más de 12 horas al día tenían un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama debido a la restricción del sistema linfático y la acumulación de toxinas en los senos.
Sin embargo, los expertos han desmentido estas afirmaciones a través de investigaciones científicas. No hay evidencia de que el uso de sostén comprima los ganglios linfáticos y afecte la salud de los senos. Los estudios han demostrado que no existe una relación entre el uso de sostén y el cáncer de mama.
La evidencia científica
Diversos estudios han analizado la posible relación entre el uso de sostén y el cáncer de mama. Un estudio publicado en la revista médica «Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention» no encontró ninguna evidencia de que el uso de sostén esté relacionado con un mayor riesgo de cáncer de mama. El estudio incluyó a mujeres posmenopáusicas y no encontró ninguna diferencia en el riesgo de cáncer de mama según la duración diaria del uso de sostén, la edad en la que comenzaron a usarlo, el tamaño del sostén o si tenía aros.
La National Breast Cancer Foundation respalda estos hallazgos y afirma que no hay evidencia que apoye la idea de que no usar sostén reduzca el riesgo de cáncer de mama. Sin embargo, recomiendan elegir un sostén que se ajuste correctamente y sea cómodo para evitar molestias.
Beneficios potenciales del uso de sostén
Aunque el uso de sostén no está relacionado con el cáncer de mama, puede tener algunos beneficios para algunas mujeres. Según un artículo de Harvard Health Publishing, usar sostén puede ayudar a disminuir la tensión de los ligamentos suspensorios de Cooper y reducir el dolor de espalda. Además, proporciona soporte durante la actividad física, lo que puede ayudar a prevenir daños en el tejido adiposo de los senos. También puede ser beneficioso para las mujeres que están amamantando, ya que puede ayudar a reducir los síntomas de dolor.
Factores de riesgo reales del cáncer de mama
Aunque no hay evidencia de que el uso de sostén cause cáncer de mama, existen otros factores de riesgo que sí están relacionados con el desarrollo de esta enfermedad. Algunos de estos factores no son modificables, como el sexo y la edad. Las mujeres tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama, especialmente a partir de los 50 años. Además, las mujeres blancas tienen un mayor riesgo que las mujeres negras, y las mutaciones genéticas heredadas, como BRCA1 y BRCA2, también aumentan el riesgo.
Otros factores de riesgo pueden ser modificables a través de un estilo de vida saludable. El sobrepeso u obesidad, la falta de actividad física, el consumo de alcohol y tabaco, y la exposición a niveles altos de radiación en el área del pecho antes de los 30 años son factores que pueden aumentar el riesgo de cáncer de mama.
*La información y los servicios disponibles en aurana.com no sustituyen en ningún caso la consulta con profesionales sanitarios competentes.
